Andar por Londres es un privilegio, comenzando por su famosa y mundialmente conocida Torre del reloj, el Big Ben es la imagen de la ciudad y se ha utilizado para numerosas fiestas y filmaciones y es un lugar frecuentado por turistas sedientos de fotografías, junto a este se encuentra el Parlamento al cual puedes entrar incluso en días de decisiones.
Acercándose al río y caminando a su orilla se puede sentir el vértigo al encontrarnos con el London Eye, que no es ni más ni menos que la mayor noria del mundo. Desde lo alto de esta atracción se puede observar toda el área metropolitana de la ciudad a vista de pájaro.
Para seguir el recorrido, te recomendamos Camden Town, un barrio al norte que alberga un enorme mercado frecuentado por 100.000 visitantes a la semana en busca de cultura y costumbres, allí se puede encontrar desde artesanía típica británica, hasta los modelos más recónditos de las culturas más perdidas. Camden Town representa un lugar ideal para degustar la gastronomía típica de la ciudad, una curiosidad del lugar es la posibilidad de ir a pie, en coche, metro, o incluso en barco desde el canal.
No puedes perderte el palacio de Buckingham que es la vivienda oficial de la realeza de Inglaterra, este castillo es similar aunque no tan impresionante como el Palacio Real de Madrid, lo particular y especialmente curioso de esta enorme vivienda es el cambio de guardia que cada tarde se ofrece en su interior. Con una simetría y coordinación perfecta, la guardia real atrae las miradas de turistas curiosos por el tradicional evento.
Otros lugares que ver en Londres y no menos importantes que los mencionados anteriormente son la Abadía de Westminster, la Torre Bridge, el Hyde Park, La Torre de Londres, y para no perderse detalle de la cultura y el talento local, no se debe desperdiciar la oportunidad de visitar el Museo Británico.