Revista Diario

Los 10 mejores tips para hacer tu novela

Publicado el 08 febrero 2013 por Rutinacortadaacuchillo @RCACoficial

Un tema internacional y popular que a más de uno desvela es el entramado de las novelas latinoamericanas. El amor y desamor, el misterio y el sorpresivo desenlace que nadie espera (guiño guiño).

Si estás pensando en armar tu propio culebrón mexicano te tiramos algunos tips.

1. El horario: Es muy importante la audiencia, por eso si estás pensando en un horario para dar a conocer tu original historia te recomendamos que apuntes al público del mediodía o media tarde. Son los más fieles, no hay con qué darle.

2. Los protagonistas: Los nombres compuestos o polémicos hacen de estas historias un género único y “originalmente” especial: Luis Eduardo, Maria Fernanda, Carlos Andrés, Dulce María, Juan Esteban… y la lista sigue.

“La mala” (se merece un párrafo aparte) : Lo ideal es que sea la novia o ex novia del protagonista. El nombre ideal para este personaje es Soraya. La madre del protagonista también puede ser “la mala” y en este caso, de ser posible, deberá tener un perro (sí, sí, uno de esos chiquitos, peluditos e insoportablemente ladradores).

3. Personajes secundarios: Nunca faltan las niñeras o empleadas domésticas para darle una vuelta de rosca a la historia. Malas o buenas, siempre son testigos de conversaciones importantes y guardan información confidencial. En algunos momentos pasan a ser decisivas por la información que manejan. El mayordomo, a diferencia de las películas, no tiene que ser necesariamente el asesino.

4. La trama: No es casual que estas historias siempre incluyan a la chica pobre que se enamora del joven apuesto, rico y bondadoso. El amor debe ser imposible y bien sufrido. No debe faltar el acaudalado llanto, la traición y el engaño. Si la pareja no sufre antes de concretar su amor no hay novela. La pobre muchacha siempre suele estar más buena que comer pollo con la mano o a veces la hacen aparentar fea al principio para que después sea despampanante (gran palabra).

5. La ambientación: Uno de los protagonistas siempre debe vivir en una mansión grosa; y el o la que se enamora es probable que habite una humilde morada o vecindad, como el Chavo. Estos lugares grandes propician que cualquiera abra una puerta y se encuentre con una situación polémica o mejor aún, que escuche conversaciones de pasillo decisivas para el desarrollo de la novela.

6. Un condimento gourmet: Siempre es bueno tener un as bajo la manga, y si de jugar buenas cartas se trata, nunca viene mal levantar el rating con una ceguera, amnesia o un accidente inesperado según corresponda. Cuanto más trágico, mejor. Y cuando se está por curar siempre sucede algo. Por ejemplo que cuando lo/la iban a operar para que recupere la vista, el médico se muere. Golpe directo al corazón y una nueva frustración para el CV.

Siempre deberá morir uno de los buenos o quedar en coma para que la gente se pregunte ¿por qué le pasan estas cosas a la gente buena?

7. Escenas de sexo sin sexo: Como estas novelas son a la tarde, este tipo de escenas se insinúan y dejan a más de un espectador recaliente. Muestran el paso a paso, se empiezan a dar masa y cuando se viene, ya los muestran dormidos o despertándose al día siguiente. Ella con la camisa de él, por supuesto. ¿Qué onda, loco? Mostrame algo: una teta, un culo.

8. Musicalización y gesticulación: La música y las caras muy artificiales para mostrar alguna emoción y los peinados ochentosos (mucho brushing, spray, flequillos). Cara de sorprendida (a lo Karina Jelinek). El toque especial en la actuación es la mirada. Rara, un único movimiento de cejas puede ilustrar casi todas las emociones. Esto es acompañado por una música de tensión, drama o terror. Abusan de los primeros planos, que intentan, sin lograrlo, compensar la inexpresividad patológica de los actores.

9. Algunos hobbies: Otro dato no menor, es el amor del protagonista masculino por los animales, preferentemente los caballos. De esta manera podrá pasearse en cuero en su establo (obvio que es re normal tener uno bien prolijo y con muchos caballos) y enamorar a la dama en cuestión. Para los hombres, mucho estar en cuero, pelando lomo. El jardinero, mecánico u otros oficios garpan, porque permiten justificar tanto bicep al aire.

10. Desenlace familiar: Tal vez lo más importante sea el inesperado final (guiño guiño). En alguno de los últimos episodios, el o la protagonista deberá enterarse que es la hija/hijo/hermana/hermano/madre/padre de la empleada, el sacerdote o la monja de turno. En caso de ser la monja la inesperada madre, la escena deberá incluir a la Hermana Claribel diciéndole al protagonista:  ”No me digas hermana, dime mamá”.

Miren este video, es un claro ejemplo de todo. No tiene desperdicio.

 


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Sobre el autor


Rutinacortadaacuchillo 1442 veces
compartido
ver su blog

El autor no ha compartido todavía su cuenta

Dossier Paperblog

Revistas