Que yo sepa nadie ha hablado del eco del silencio.
Soy todo labios cuando me callo.
«El verano es para los oportunistas» (H.D. Thoreau).
Principales animales «síquicos»: los gatos, los perros, los caballos...
En el canto del gallo está ya implícito el huevo de la gallina.
De las estrellas cuelgan nuestros calcetines cuando soñamos.
En una biblioteca conventual de España se descubrieron quince tomos acerca de la Nada.
¿Cómo murió el músico Ernest Chausson? —aprendiendo a montar en bicicleta chocó contra un muro y se estrelló.
Todo se explica por las adivinanzas, no por las evidencias.
En el pensamiento no hay rimas, oh poetas.
En el esloveno el falo se dice tretja nosa, que significa «el tercer pie».
Nunca cambia de sitio el infinito.
Bendito sea el hombre que recorre las calles riendo a carcajadas.
El primer mueble y el último: la cama y el ataúd.
El sol caliente elefantes y hormigas.
Me unto de noche.
Sociedad rima con suciedad.
El escritor mira cómo le está mirando el papel blanco.
Confundo la palabra Sur con la palabra Mar.
La palabra «orgullo» debería escribirse «orguyo».
Los mudos sacan palabras de los ojos.
Los muertos se tratan de usted.
Besos comunicantes.
Cioran dice: «Sólo cultivan el aforismo aquellos que han conocido el miedo en medio de las palabras, ese miedo de hundirse con todas las palabras».