Hace unos días comprobé que los álamos la atacan sin querer. Vivimos en una colonia llena de álamos: un joven álamo frente a nuestra casa, álamos en las banquetas, álamos en los espacios que pretenden ser verdes, álamos en los terrenos a un lado y al otro de la colonia. Al parecer, habrá que mudarnos antes de lo previsto.Silvia Parque
