Amistad... Traición... Violencia...
Jacob y Río sostenían sus respectivas pistolas en las manos. Los cañones apuntaban a la cabeza del contrario, casi rozando las frentes pringadas de sudor. Si uno se fijaba bien, podía ver un ligero movimiento en el arma de Jacob: estaba temblando. Sin embargo, la que sostenía Río se mantenía tan firme como si una mano externa, una que estuviese contemplando el funesto espectáculo, hubiese pulsado el Pausede un mando. Desde luego, era lo que cabía esperar de Río, por eso a Jacob no le dolió el hecho de que su compañero no mostrara un ápice de compasión; además, ahora mismo estaba tan confuso, que solo podía pensar en una cosa. Durante un breve segundo, se preguntó qué estaría pensando Río. Las palabras de su rival, antes del doble retumbar de los disparos, contestaron a esa pregunta. Unas palabras que no distaban demasiado de lo que rondaba por su futura masa de sesos desparramados.*Nota: Los ojos de Tiffany es uno de los relatos de los que más orgulloso y satisfecho estoy, pero también de los más largos, por eso he decidido volver a publicarlo y esta vez por capítulos. Pienso que este formato en partes le viene muy bien y ayuda a su lectura en una plataforma como esta.
Espero que lo disfrutéis tanto como yo lo hice escribiéndolo allá por 2015.