Los reyes magos

Desde hace semanas todos los niños de Guardo estaban pendientes de escribir la carta a sus Majestades los Reyes Magos de Oriente.

Y por fin llegó el gran día...
Los pajes desde bien temprano estaban con sus caballos dispuestos para escoltar la carroza real que hacía su recorrido por las calles de Guardo.


Los niños montados en carrozas iban muy ilusionados a esperar a tan regios visitantes al apeadero, porque llegaban en tren.


Las calles cercanas estaban llenas a rebosar, mientras a los pequeños en brazos de sus padres se le hacia eterna la espera...


A pesar del frío la expectación de los niños era evidente. Bien abrigados con gorros y bufandas, más tímidos unos y otros con cara más picarona miraban a la cámara divertidos.

De repente el tren hizo su aparición con un fuerte pitido y de él se bajaron sus Majestades los Reyes Magos que se aposentaron en su Carroza Real.

Los reporteros de la localidad, les esperaban en el anden dispuestos a seguirles en su recorrido por las calles del pueblo.


Se podían ver a lo largo del recorrido familias enteras saludando


Y muchas caras sonrientes...

Otros saludaban desde las ventanas...

Mientras mi amigo Santi, realizaba su trabajo con mucha eficacia.

Los pajes reales infantiles quisieron hacerse una fotografía con sus Majestades.

Algunas valientes sin miedo al frío, les acompañaba de cerca.

En el Portal de Belén, les esperaba la Virgen María, San José y el Niño.
La Virgen muy sonriente estaba encantada de la ayuda que San Jose le prestaba en el cuidado del Niño.

El bebé era de unos amigos, y estuvo en todo momento arropado por sus improvisados padres.

El bebé parecía sentirse muy bien en los brazos de San José.

Este precioso angelito de alas blancas, era hermano del bebé Niño Jesús. Se le puede ver muy serio en su papel...

A la derecha se puede ver a los padres de las criaturas- el bebé y el angelito- muy sonrientes..



Después los niños fueron subiendo uno a uno para recibir un regalo de sus Majestades.

Mi amiga Gloria, estaba embelesada con su preciosa nieta.

Mi amigo Izan, pudo hacerse una foto con ellos cuando hubieron terminado.
Gracias Majestades por haber hecho feliz a mi amigo.

Quise hacer una fotografía a Izan con sus padres y hermano. Últimamente ha estado muy malito y necesitan el apoyo de la gente y amigos que les queremos.

Yo también quise hacerme una foto con ellos.
Terminé la noche tomando un chocolate calentito que el Ayuntamiento había preparado para la ocasión.