Me comentó la educadora de Lola, que ahora usaban mucho los rulos de velcro, así que los compramos en casa y es cierto, que a Lola le hacen bastante gracia.
La gracia fue cuando nos los puso en la cabeza, que para eso están, claro. Y sin darse cuenta, mi marido bajó a la calle con uno puesto. Bajó al chino de dos calles más abajo y se cruzó con vecinos que no le dijeron nada. Mi marido al subir en el ascensor y verse en el espejo, fue cuando se dio cuenta que había notado que los vecinos le miraron raro, porque llevaba un rulo de Lola.
Cuando le vi entrar en casa, con el rulillo verde puesto, me partí de risa.Dan mucho juego, nosotros tenemos rulos de diferentes tamaños y colores y los mete uno dentro de otros, te los pone en la cabeza o quizás te los pone en el jersey. Si los compráis, ojo, que puede pasarte como a ser_padre. Y tampoco descarto que a mi me pase también.
En las siguientes imágenes os pongo otros juegos que les encantan:
Cuidado con los rulos, pueden jugaros una mala pasada!!!