"Que se aburren de ser niños y quieren crecer rápido, para después desear ser niños otra vez. Que desperdician la salud para hacer dinero y luego pierden el dinero para recuperar la salud. Que ansían el futuro y olvidan el presente y así no viven ni el presente ni el futuro. Que viven como si nunca fuesen a morir y mueren como si nunca hubieran vivido".
El periodista permaneció en silencio un buen rato y luego le respondió con esta nueva pregunta: "pero, ¿cuáles son las lecciones de vida que debemos aprender?" Y con una sonrisa el Dalai respondió:
"Que no pueden hacer que nadie los ame, sino dejarse amar. Que lo más valioso en la vida no es lo que tenemos, sino a quien tenemos. Que una persona rica no es quien tiene más, sino quien necesita menos. Que el dinero puede comprar todo menos la felicidad. Que el físico atrae, pero la personalidad enamora. Que quien no valora lo que tiene, algún día se lamentará por haberlo perdido. Que quien hace mal algún día recibirá su merecido".
Si quieres ser feliz, haz feliz a alguien.
Si quieres recibir, da un poco de ti, rodéate de buenas personas y sé una de ellas.
Recuerda: ¡a veces quien menos esperas es quien te hará vivir buenas experiencias!
Nunca arruines tu presente por un pasado que no tiene futuro.