Tienen las noches un tempo
en el que, el silencio
casi se mata.
en algún parque los pájaros
con sus trajes de ramas,
la insolencia esconden
tempo de silencio
pausa.
Hay un equilibrio de tonos grises
en la selva de los suelos
y como si tuviesen vida propia
nos miran tropezar
¿Cuándo fue
que los seres de la noche
nos asustamos tanto?
por devolvernos al día
naufragamos
que la luz no se hará.
Tempo de silencio
¿y qué más da?
A veces, a lo lejos
estornudan motores.
Debe haber un túnel infinito
circular
y hay tensión, y un grito
en las pupilas dilatadas
de este, nuestro animal.
En la maraña del pelo
amontonadas mariposas
perdiendo los sueños
¡que siempre fue de noche
cuando la vida!
tienen las noches un tempo
de purísima tensión emocional
sobre un cable
equilibrio
tuvimos suerte,
sobrevivimos al día
y decidimos
dejar de preguntar
la noche que me dijiste:
que te quiero, en calma,
cuídame el silencio
bájame la espalda
piérdete de ausencia
llórame la montaña
bórrame el lunar
o cámbialo por dos
muérdeme la luz
clávame la memoria
de los poros desiertos
sobre la historia
y tócame un concierto.
Tempo de silencio
por girar en el aire
de la nada
sideral
la huella es el premio
al atropello de pensamientos
y maldito el camión
que corre
por volver.