Bajo la magia inmensa e imnótica de nuestro paso por la isla de La Gomera. Ruta Siete tuvo el placer, honor y grandísima suerte, de colaborar en la recuperación y cura de la herida que durante este verano, sufrió esta isla. Durante esos días, sentí casi por primera vez, la necesidad de volver a escribir, de componer y jugar con las palabras y las letras. El corazón se me llenó de sentimientos y sensaciones nuevas y renacieron muchas que ya no recordaba. El impacto del olor y la impresión de esas imágenes hicieron que todos tuviéramos la sensibilidad a flor de piel,.... nuestra última isla... nuestros últimos días... El principio del fin o final del principio... como se quiera mirar. El caso es que ese día, escribí la reflexión que a continuación expongo. Espero que les llegue y que les guste, e intentar transmitir lo que yo sentí y lo que deseo para esta isla tan linda.Gracias La Gomera, gracias Ru7a!28 de Agosto de 2012 Todo corazón resulta herido en alguna ocasión. Hoy he sentido el corazón de una tierra herida y desolada por las huellas y duras cicatrices que el rojo fuego dejó tras su paso por la que era, y con su verde esperanza, volverá a ser, el paisaje de la isla de La Gomera.Con el corazón encogido, un nudo en la garganta y los ojos cristalinos, pisé las blancas cenizas que nos cuentan las horas de profundo calor que dejaron las imágenes y sensaciones que hoy hemos presenciado.
“Donde hubo fuego, siempre quedarán cenizas”.
Donde el verde lima brilló, Donde hoy el manto oscuro tapa el sol y asfixia el aire;Mañana el cielo será azul claro,El viento soplará con alegría, retando al canto de los pájaros.Donde ayer los nidos quedaron vacíos,Mañana naceran a por montones sus crías.Hagamos que el bosque grite con fuerza y diga:“Aráñame el corazón, encadéname las alas, que siempre quedan los que me quieren,que siempre quedan los que me desatan”.
Seamos esos que desatan y liberan la belleza del paisaje, desatemos esas ramas y árboles atados y cuidemos de los grandes recuerdos y momentos que esa isla nos regaló.Enamorada de La Gomera, vuelvo a casa con un pedazito de ella en mi corazón.Gracias, La Gomera. Ánimo, fuerza, pureza y salud para tu hermoso bosque.Yle