Sin duda, la obra de Marta Martín Girón brilla por su estilo literario, pero quizá hay aspectos que sobran y que podrían provocar el rechazo en algunos lectores.
Nos referimos a un par de digresiones en las que quiere subrayar de qué va la novela o qué critica. Salvo por este aspecto, la trama está muy bien diseñada y la emoción se mantiene hasta la última página. Nos quedamos también con lo que subyace y con cómo entra la escritora en la mente de quien comete los crímenes que se narran.
La primera de una trilogía siempre es la mejor que suele decirse. De momento, nos ha gustado bastante y demuestra que hay mimbres suficientes para darle forma a una obra repleta de guiños y detalles que encantarán al aficionado a la novela negra de calidad.