Da igual todo, pienso comerme el mundo como siempre, haré lo que me de la gana que es lo que siempre he hecho y es lo que siempre pienso, si la envidia fuera tiña... sé que puedo.
Sé que me gusta tener el control de todo.
Pero tú haces tambalear las cosas, los muebles de mi habitación, mi cama, el puto lapicero, el tocador...
Y yo me río porque eres el único que lo consigue...
calmar a la fiera que llevo dentro y hacerla entrar en razón.
A veces la calma me asusta.
Te gusta llevarla al extremo para después morir conmigo o hacerme morir mil veces seguidas.
Eres un veneno de tío.
Pero follas de puta madre.
Y no puedo negar que me gusta mucho cuando te empalmas solo con mirarme.
Eso nunca ha cambiado... detalles que no cambian con el tiempo.
Que le vamos a hacer.