Antier por primera vez hice payasadas para que B comiera. Ayer por primera vez le metí algunas cucharadas en la boca; no la forcé ni le di algo que no le gustara, pero se las metí cuando abría la boca. No me gusta hacerlo, pero me preocupa que coma poco por la gripe, habiendo pasado tan pocos días desde que comía poco por la infección en la garganta. Afortunadamente, no deja de querer leche, y sigue tomando leche materna; pero siento que adelgaza.
Desde ayer, tose. Le dijeron a su papá que lo que trae no contagia, pero mi niña no tosía, y ahora tose. Yo estoy enferma también, así que "pido esquina" porque lo demás no se detiene, al contrario: parece que las demandas -de atención, de dinero...- se llaman una a la otra, y he pensado que está bien: que sin los momentos de crisis, no me movería a un lugar diferente: sería como el hámster dando vueltas en su rueda. Así que creo que está bien, pero me canso.
Silvia Parque