Otro método de ejercicio físico. Otro método nuevo y “diferente” de ejercicio físico. Otro método nuevo y “diferente” de ejercicio físico que promete resultados.
Bueno, esto no, el método natural no promete resultados por ninguna parte. De hecho, su lema, “¿Para qué hacer ejercicio físico? ¡Para nada!”, parece salido del menú de una posada Hobbit.
Voy a hacer sincero, el método natural, me confundió tanto que no lo entendí. Ni siquiera hice un gran esfuerzo. Me encontré con él por casualidad, en la red. Roberto Sánchez tiene un blog, Escucha tu cuerpo cuya filosofía resuena bien con la mía. Y por esas cosas le añado a mi twitter y a mi newsbeuter. Algunas de sus cosas me parecían exageradas, pero nada como el dichoso método natural.
¿Qué tengo que trepar? ¿Con mi peso? ¿Y mi lesión en el codo? Lo siento, no quiero morir. Yo me quedo con correr, con mis diezmil pasitos y mi natación. Gracias. Además, HAY que ponerse esas zapatillas de cinco dedos con las que vas haciendo el ridículo. Ya me cuesta ir corriendo por ahí pensando en que todo el mundo está pensando que pueden correr más que yo, para encima hacerlo llamarlo la atención. Ya se sabe que si no estás en forma no tienes “derecho” a calzar equipo de deporte bueno.
Pero dejemos mis trabaderas mentales. Todo cambió cuando pude ver lo que era en realidad el método natural: concretamente en un vídeo. Éste.
Entonces me dije, “ah, pues esto lo puedo hacer yo también. Vamos a probarlo.”
La prueba me divirtió lo bastante para comprarme el ebook, que me pasé a formato kindle con Calibre —Robert, tío, podías hacerlo tú, que no es tan difícil— y hacer que se convirtiera desde entonces en mi método principal y favorito de ejercicio. Aquí viene un extracto de mi diario de ejercicio, que es una versión adaptada a mí y a mi vida del método natural.
- 30/12/13 lun
- Una sesión ligera, carreras a distintos ritmos, algo de saltos, algunas flexiones de brazos, básicamente pasar el rato, unos niños se las apañaron para meter un cuadricóptero teledirigido entre las ramas de una palmera. Trate de ayudar, pero no hubo manera, seguí corriendo
- 31/12/13 mar
- AM Salí con los sobrinos al parque. Corrimos, saltamos para evitar las baldosas blancas, escalamos, corrimos por los columpios, exploramos para buscar animales, encontramos mirlos y gorriones, también palomas. Aprendimos sobre la inercia, los dragos y los cardones
- 31/12/13 mar
- Una sesión corta, pero vital, carreras, saltos, flexiones, bastante de equilibrio y un poco de arrastrarse, no mucho por lo del codo
- 01/01/14 mié
- AM una sesión de duración normal. Carrera y caminar, saltos, trepar, montones de sonrisas, algo de gateo y arrastre, no mucho porque la hierba todavía estaba mojada
- 06/01/14 lun
- Una sesión estupenda, carrera, andar, saltos, algo de trepar y equilibrios, también lanzar. Bastante divertido
- 07/01/14 mar
- Sesión variada, con bastante de lanzamiento de piedras y carrera por terreno irregular, un poquillo cansado, deben ser las fiestas
El libro en sí, está bien escrito. Dice el autor que no es un escritor, pero a mí si me lo pareció porque estaba leyendo cosas y las entendía y hasta me parecía ameno. No es Shakespeare, gracias a Dios. Es un libro de ejercicio físico, está bien hecho, ¿qué más quiero?
No es un libro demasiado práctico, sino que más bien ahonda en los fundamentos del método. Tampoco se refiere a demasiada teoría. Toda la preocupación del libro es que entiendas las razones y los elementos principales para que puedas adaptar el método a tu cuerpo y a tu vida. O sea que trepar no tiene por qué significar irte al rocódromo, ni arrastrarte significa pasar bajo alambre de espino, ni correr esprintar durante cientos de metros. Si solo puedes andar, anda, y ve variando, ve cambiando de ejercicio, de superficie y de ritmo. Piensa en lo que harías si estuvieras en la naturaleza, piensa en lo que tu cuerpo está diseñado para hacer y en cómo está ahora mismo.
Pues el libro es eso mismo, pero mejor explicado y más fundamentado. Ah, y tiene parte polémica, cuando se mete con los deportistas de competición. Jugosita para los ateos del fútbol profesional como yo.
Por cierto Robert, cuando vaya por tu tierra me debes un café, o una clase, a elegir. A ver si te vas a creer que este post es gratis.