Mi amiga María de Badoo.

Publicado el 09 mayo 2014 por Rizosa
Ayer, un colega mío del norte entraba en Badoo para echarle un vistazo al mercado de la carne femenino cuando, de pronto y para su sorpresa, se encontró conmigo.Bueno, claro, no podía ser yo: la mujer que tenía una foto mía en su perfil se llama María, tiene 34 años y es de Avilés. Pero la cuestión es que ahí estaba yo, en la foto que me hice en mi cumpleaños nº 30 y que colgué en este blog, sonriendo inocentemente desde tierras norteñas y buscando novio en interné.
Mira que llevo años y años en las redes y he visto de todo, pero nunca dejará de sorprenderme la estupidez humana.Por lo visto a esta buena mujer "le daba reparo poner su foto real en el perfil público". Claro, o sea. Te metes en una web de contactos explícita y directa para buscar maromo, pero te da corte poner tu foto y decides usar la de otra persona cualquiera. PUES SUERTE EN LA VIDA.
Ayer la denunciamos a Badoo por no hacerlo al departamento de delitos informáticos. En diez minutos ya le habían retirado la foto, pero mi amiga María sigue teniendo algunas fotos privadas a las que, claro, no puedo acceder. Igual ahí sigo saliendo yo, haciendo el canelo en clase o tomando mojitos al atardecer. ¿Cuántos hombres habrán visto frustradas sus ilusiones al creer que quedan con una maravillosa mujer de pelo rizado y brillante para después descubrir que no soy yo? ¿Cuántos años llevará María pasándose la ley por el pokemon? ¿Cuántas caras habrá tenido su perfil?
Nunca lo sabremos. Lo que sí sé es que tengo que preguntarle si ligó mucho con mi foto, que oye, si algún pretendiente no le gustó igual puede pasarme su contacto, que nunca se sabe.