El fin de semana pasado competí por segunda vez en un campeonato local de karate en Tokio, en esta ocasión en Zama.
Estos campeonatos locales suelen ser bastante pequeños, nada comparado con los que se presenta el señor Oskar que son los nacionales. A mi para eso me queda aún bastante.
Lo cierto es que no me gusta competir, no me gusta nada. Prefiero aprender a mi bola, y en la relativa tranquilidad de mi dojo. Prefiero, por preferir, quedarme en casa, a ser posible tumbado en el sofá comiendo unos pistachos.
Por eso cada vez que tengo la oportunidad, me apunto. Porque no me gusta, porque me obliga a salir de mi zona de confort. Porque aunque no lo parezca, acojona bastante plantarte en medio de todo este tinglado con gente mirándote, juzgando cada uno de tus movimientos. O aun peor, con otro señor delante de ti pensando en como calzarte el mayor número de hostias.
Porque esto es así, a pesar de todo lo bonito que pueda parecer con los uniformes blancos, las cintas de colores a la cintura, y todo ese halo de misticismo que cuelga a sus espaldas, el Karate es un arte marcial, y como tal, está diseñado para dar/recibir palos de la manera mas eficiente posible.
Pero bueno, las competiciones a las que yo me presento al menos usan protecciones así que no es tan malo.
A lo que iba. Contrariando a todos mis instintos, me levanté el domingo a eso de las 6 de la mañana para meter algo de combustible en el cuerpo y tomar el tren que me llevaría hasta Zama, allá donde se perdieron las chancletas de Perry.
Esta vez ya sabía mas o menos lo que me esperaba, así que debo decir que no tuve a penas nervios. Tenía tooodo un largo día por delante, así que mejor tomar las cosas con calma.
Me reuní con la gente de mi escuela en la estación y marchamos de camino al estadio. Al llegar vi que había una cantidad moderada de gente, aunque me da la sensación de que en el campeonato anterior hubo mas gente compitiendo.
Nuevamente participaba en las dos modalidades, Kata y Combate. Así que durante la mayor parte de la mañana estuve haciendo estiramientos y tratando de repasar los puntos en los que siempre fallo. Había estado entrenando bastante las semanas anteriores pero me tenía la sensación de que cuanto más entrenaba peor se me daba la cosa, así que me lo tomé con calma.
Uno de mis problemas es que me falta elasticidad en el cuerpo. Y eso con 35 años no te creas que es fácil de arreglar. Aunque ha mejorado la cosa con respecto a hace un año me falta muchísimo! Otro de los problemas es que no tengo la estabilidad necesaria para marcar las posturas, pero eso llega con el tiempo (o eso quiero pensar)
En fin, cuando llegó mi turno en los Katas traté de olvidarme de todo y esta vez tratar de disfrutar el momento en lugar de estar deseando que terminara de una vez. Y me sorprendí pasando las primeras rondas hasta llegar a los cuartos de final!…. donde fui eventualmente eliminado. Perdí contra un chaval que era bastante bueno y que llegó a la final (por aquello de consolarme)
Ojisan CaDs haciendo Heian Nidan
Lo cierto es que no daba un duro por mi mismo en los katas. Aún hay muchas cosas que me faltan por controlar. Pero como siempre, en cada campeonato se aprende algo, así que confío en mejorar en el futuro.
Si tenía alguna posibilidad era en Combate, aunque viendo que en esta ocasión mi grupo mezclaba estudiantes con abuelos no lo tenía yo del todo claro.
También, entrenando con los compañeros, tuve la mala suerte de llevarme un golpe fino en las costillas que me había lesionado hace unos meses y me dejó algo tocado. Ahora viendo los videos me doy cuenta de que una de mis manos está cubriendo casi todo el tiempo el costado derecho.
Mal empezábamos :-/
Había estado practicando velocidad de reacción, velocidad de mano y tratar de ser mas explosivo con los movimientos. También me di cuenta de que al moverme con tanto salto en el sitio lo único que conseguía era cansarme, así que ahora trato de moverme lo justo para fintar, atacar o defender.
En mi primer combate me tocó con un estudiante jovencito, la verdad es que en altura le sacaba bastante, pero el tío era bastante rápido. También me sorprendió la agresividad con la que comenzó, creo que me costó bastante entrar en el combate y eso es algo que definitivamente tengo que corregir.
Ojisan CaDs Round 1
Al final pude usar mi altura y la longitud de mis brazos para contrarrestar su velocidad, tratar de atacar desde lejos. Me faltó control, usar mas las caderas y marcar mas los movimientos para ganar los puntos. Hay varias veces que hice contacto pero o fue demasiado fuerte/brusco, o no les quedó claro a los jueces y me llevé demasiadas faltas.
También hubo un momento en el que me escurrí, había algo en el suelo. Me sorprendió (aunque no debería de haberme sorprendido) que me atacaran mientras estaba en el suelo. Supongo esto te lo dará la experiencia participando en torneos. Sea como sea pude defenderme y no me marcaron punto. Al cabo de unos segundos mi oponente se escurrió en el mismo sitio, pero preferí darle tiempo a que se levantara.
El combate me dejó regusto amargo, me llevé demasiadas faltas y me di cuenta de lo mucho que necesito mejorar en control.
El segundo combate tal vez fuera el más difícil. Esta vez el adversario era mas o menos de mi misma altura, con lo que no podía usar la longitud de mi brazo tan fácilmente, y además el tío me había visto combatir durante el primer round, así que estaba preparado.
También entró con una agresividad fina, y me marcó un punto al cabo de un par de segundos de comenzar. Lo veía negro.
Pero bueno acabábamos de comenzar así que había tiempo.
Traté de usar un par de combinaciones sin éxito ninguno, me marcaron algunas faltas que ahora viendo el video no acabo de entender, porque si bien yo arreé fuerte, el también lo hizo. Hasta el punto de que aun llevando protector en la cabeza me crujió la nariz y tuve que para esperar a que se pasara.
Ojisan CaDs Round 2
Resulta curioso como funciona tu cuerpo cuando estás de adrenalina hasta las cejas. Nada te duele! y la mente a penas piensa. Recuerdo ahora, viendo los videos, que me sentaron y yo solo estaba pendiente de ver cuando paraba de sangrar la cosa para poder volver a terminar el combate.
Pensaba que iba un punto por debajo y me acababan de crujir la nariz, así que probablemente perdería este combate. Pero mientras hubiera tiempo iba a seguir dando batalla.
Me costó un poco retomar el combate, pero por algún motivo mi oponente también parecía algo desconcentrado, así que pensé en arriesgar un poco más, dejarme llevar y preocuparme menos de las faltas.
Y de alguna manera funcionó, no solo conseguí empatar si no que en los últimos segundos logré darle la vuelta al resultado, a pesar nuevamente de llenarme de faltas.
Algo que sin duda tengo que mejorar, porque me deja con un regusto de marrullero que no me acaba de gustar y que cojones, no es plan.
Si mi segundo combate tal vez fuera el más complicado, el tercero fue el que mas disfruté.
A lo largo de la competición entablé amistad con otro participante. Tuvimos ocasión de charlar durante los katas y mientras esperábamos las rondas de combate y era un tío majo.
Después de las dos primeras rondas resultó que en el tercer combate, las semi-finales, nos tocaba enfrentarnos. Así que nos deseamos suerte mútuamente, yo con un yoroshiku onegaishimasu y él con un ganbarimasu.
Fue un momento increíble y que creo que es el que se me queda en la cabeza a modo de recuerdo. La cortesía y la camaradería que surge de estos eventos.
Pero seamos sinceros, era la tercera ronda y uno no está acostumbrado a estos trotes. Afortunadamente mi oponente tampoco estaba ya como para correr una maratón y el tío me tenía calado. Estuvo durante casi todo el tiempo a la contra y aunque en el video no se ve (se acabó la batería de la cámara) sólo logré marcarle un punto hacia el final aprovechando un descuido que tuvo.
Ojisan CaDs Round 3
Fue un verdadero placer combatir con este señor. Tal vez porque me sentí menos tenso no acumulé tantas faltas en esta ocasión, pude controlar un poco mas mis golpes y creo que entendí mucho mas el ritmo del combate. Hasta el momento sin duda el combate que más he disfrutado.
Y nuevamente de alguna manera estaba en una final. Esta vez no por ausencia de contrincantes, si no tras haber pasado por tres rondas. Con los costados doloridos, el pecho dolorido y un nudillo de la mazo izquierda dolorido. No vuelvo a participar en uno de estos eventos sin un protector de pecho.
Mi contrincante nuevamente era casi igual de alto que yo, tal vez unos años mayor. Y afortunadamente parecía igual de vapuleado que yo. Había posibilidades!
Peero la final fue bastante aburrida, los dos estuvimos bastante a la defensiva para no regalar puntos. Sabíamos mas o menos las técnicas que habíamos estado usando en los combates anteriores así que era difícil sorprender. Yo decidí arriesgar con las patadas (que todavía no tengo dominadas y en las que soy extremadamente leeeento) y por arriesgar regalé un punto. Casi sin tiempo y de perdidos al río volví a arriesgar con otra patada que rozó la cabeza (y que me hubiera dado 3 puntos). Por el rabillo del ojo vi que al menos uno de los jueces había marcado el punto como válido, pero el árbitro no lo vio así y finalmente terminé perdiendo la final 1 a 0.
Ojisan CaDs Apaleado
Después de finalizar con los saludos oficiales, nuevamente me sorprendió la camaradería de la gente. El chaval que me crujió la nariz vido a pedirme perdón, muchos me felicitaron por los combates. Yo hice lo mismo, y me disculpé por la falta de control con algunos golpes… en fin, gustico terminar así.
Al cabo de unos minutos y a medida que la adrenalina se pasaba, comencé a sentir los golpes, así que después de hacer las fotos con la gente de la escuela, regresé a casa como perro apaleado donde fui a dar con mis huesos en el sofá.
Mención especial a mi novia que a pesar de la resaca con la que se levantó me acompañó durante todo el día y me hizo el favor de grabarme los videos que he subido por aquí. A ver si viéndolos aprendo algo.
El próximo en Otoño, que los que quedan en verano son ligas mayores y ahí aún no pinto nada.
Eso si, iré a animar a los colegas