Hoy os traigo la segunda parte de mi visita a Valença do Minho. Que bien lo pasamos y que corto se nos hizo el día!!
Valença me parece un sitio con mucho encanto, un oasis de piedra en un valle siempre verde del río Miño, un rincón del mundo donde todo tiene tintas muy difuminadas… Calles empedradas, el mercado, las murallas, la gente, el vino, las casas medievales, numerosos comercios pequeños repartidos por las calles.
Este pequeño espacio, que en algún momento de su historia fue creado para no dejar pasar a nadie, ahora es ese lugar adorable lleno de color y alegría.
De nave única longitudinal encabezada por un ábside rectangular. El campanario cuadrangular, capilla y sacristía rectangulares se encuentran adosadas al muro sur. La fachada principal contiene un portal con arcos de medio punto con tres arquivoltas sostenidas por columnas rematadas por capiteles.
Era inevitable no hacer este "robado".
Mi madre y mi tía mirando los "macacos" (que diría mi abuelo que era portugués), esta tienda nos encantó y compramos algunas cositas.
En Portugal tienen muy buena fama los textiles, es típico que las mujeres, españolas vengan a la ciudad a comprar algodón de todo tipo a precios muy competitivos respecto a los españoles.
Una fortaleza con más de 800 años de historia.
Sus primeros muros se levantaron a inicios del XIII consolidándose durante esa centuria el castillo medieval, su nombre fundacional era Contrasta .
Es en el siglo XVII, durante las Guerras da Restauración, cuando la fortaleza se amplía a plaza fuerte ganando dimensión hasta adquirir el aspecto que conserva en la actualidad.
El caserío, las construcciones militares, las iglesias, las vistas sobre el rio Minho, el antiguo puente metálico y la gallega ciudad medieval de Tui, completan un conjunto singular.
¿Os ha gustado Valença?¿Qué os ha llamado más la atención?¡¡Hasta mañana!!Muchas gracias por tus comentarios!!