Hay personas que me enseñan más de mi profesión en una conversación distendida que todos los profesores que tuve en los años de carrera. Con ellas me pasa. Aprendo de la historia recierte del periodismo en esta tierra, y también de los políticos que han ido pasando ante sus micrófonos y grabadoras, mientras ellas se hacían, detrás, más sabias y más críticas.
Hay personas que me enseñan más de mi profesión en una conversación distendida que todos los profesores que tuve en los años de carrera. Con ellas me pasa. Aprendo de la historia recierte del periodismo en esta tierra, y también de los políticos que han ido pasando ante sus micrófonos y grabadoras, mientras ellas se hacían, detrás, más sabias y más críticas.