PRIMERA VOZ:
Soy lenta como el mundo, y muy paciente.Giro en mi ritmo, los soles y los astrosme observan con atención. El celo de la luna es algo más personal:pasa junto a mí, y vuelve a pasar, luminosa como una enfermera.¿Acaso la apena lo que va a ocurrir? No lo creo.Simplemente la asombra tanta fertilidad.
Cuando salgo a pasear, soy todo un acontecimiento.No tengo que pensar ni ensayar nada.Lo que se gesta dentro de mí, sucederá por sí solo.El faisán está parado en la colina;ordenando su plumaje musco. No puedo evitar sonreír por cuanto sé que existe en míHojas y pétalos me asisten. Ya estoy preparada.
Sylvia Plath leyendo su poema
Desde que me he quedado embarazada solo veo mujeres embarazadas. Estoy leyendo a mujeres-madre reivindicando la M de mujer y la M de madre. Es una suerte de complicidad, una mirada nueva hacia el mundo, hacia lo femenino, hacia el cuerpo y hacia la vida que habita mi útero. Busco madres que escriben y comparto la lista de mis lecturas de verano:
*Silvia Plath en “Tres mujeres. Poema para tres voces” define el escenario de un hospital de maternidad con tres voces de mujer. El poemario empieza con el poema que ilustra esta entrada en el blog y que no he dejado de leer desde que la prueba de embarazo dio positivo. Y a veces, me repito el primer verso: “Soy lenta como el mundo, y muy paciente”.
*Maria-Mercè Marçal a “Sal oberta” tracta poèticament l'embaràs i el naixement de la seva filla Heura i de la seva decisió de la maternitat en solitari com mostra al poemot que puc deixar de llegir Triar.
*Leo a Mercè Rodoreda y Marina Tsvetàieva y sus relaciones convulsas con sus hijos.
*Blanca Llum Vidal en “Punyetera flor” pareix que treu els poemes escanyats pel cordó umbilical.
*Agustina Guerrero en “La Volátil. Mamma mía!” dibuja la historia de su embarazo en una novela gráfica dividida en tres trimestres. Me he sentido identificada al leerlo y todavía estoy en la mitad del embarazo pero es tan cierto que cuando estás embarazada te sientes inmensamente mujer y superpoderosa como que nos meten el miedo en el cuerpo al principio del embarazo. Es curioso pensar que durante 3 meses hemos aguantado en silencio la alegría de nuestra futura vida por miedo a perderla. Y ahora estoy tan feliz que quiero gritar a los cuatro vientos la metamorfosis que estoy viviendo en el cuerpo, en la mente y en el corazón.
*Sigo el diario de los líquidos amnióticos de Annalis Marí Pegrum en el blog de La Tribu de Frida. También leí en el blog de Luna Miguel su proceso de duelo.
*Y ya soy fan del Club de Malas Madres y de su publicación en Lunwerg. ¡Maravillosa!
*Tengo muchas ganas de leer “Siamesas” de Maria Ramos poemario editado por El Gaviero que todavía no he encontrado en la isla pero que seguiré buscando.
Y sigo escribiendo sobre mí y sobre la vida que me habita en los cuadernos que transito. El último poema publicado fue Batecs de Vida. En breve compartiré los nuevos poemas para seguir creciendo.