Alguna vez hice entrevistas de selección de personal, y llegó a ocurrir que los candidatos fueran personas en un rango de edad del que se dice que ha perdido posibilidades en el mercado de trabajo; algunas eran mujeres de mediana edad, que buscaban empleo luego de un tiempo de no trabajar fuera de casa.
Entiendo que en muchas organizaciones puede primar la consigna de contratar personas con una edad entre X años y Y años, y que todos los que no entren en tal rango quedan "fuera de la jugada". Pero habrá organizaciones en las que no sea asi. Desde mi experiencia del lado de quien entrevista, puedo decir que si se trata de una mujer "no tan joven", que busca empleo, sobre todo después de varios años de "estar en casa", le convendría saber lo siguiente:
- El entrevistador esperará que la persona se vea como una profesional en su ramo. Asi como hay jóvenes muy jóvenes que buscan trabajo con jeans desgarrados, algunas mujeres maduras van a su entrevista, vestidas más como anfitrionas de un baby shower, que como licenciadas-en, técnicas-en, etc.
- Entre alguien que aprende muy rápido, y alguien que ya es capaz, es de esperarse que el empleador prefiera a quien ya es capaz. La actualización es vital. La persona debe, al menos, saber de qué se está hablando, y ofrecer alternativas si no cuenta con las competencias que se le piden.
- La actitud de quien llega, debe ser compatible con el ambiente que ya hay en el lugar de trabajo. Esto regresa al punto número 1: El empleador necesita a una secretaria, a una profesora, etc., no a una "mamá" -y mucho menos a una "suegra"-. Esto tiene que ver con los gestos, con el vocabulario y con las opiniones expresadas; pero difícilmente alguien podrá controlar sus gestos, vocabularios u opiniones, para parecer compatible con el ambiente. Lo mejor es que la persona realmente sea adaptativa, y que pueda estar relajada; se nota cuando es así.
Silvia Parque