La imagen de Amal recorrió el mundo a partir de la historia del periódico norteamericano y expuso ante la opinión pública la tragedia diaria en aquel olvidado país que está condenado a una guerra catastrófica desde hace tres eternos años.
Fue tanta la repercusión que tuvo la foto de la niña, que centenares de lectores se movilizaron para intentar ayudar de alguna manera a la familia. ❤
Ese número podría multiplicarse hasta llegar a los 14 millones de personas (entre menores y adultos) de acuerdo a los cálculos hechos por las Naciones Unidas.]
infobae.com/" Sencillamente no hay explicación que Estados Unidos u otros países como Reino Unido o Francia puedan ofrecer para justificar el flujo constante de armas hacia la coalición encabezada por Arabia Saudí para su uso en el conflicto de Yemen . En los últimos 30 meses, esta coalición ha cometido, una y otra vez, graves violaciones del derecho internacional, con consecuencias devastadoras para la población civil." Amnistía Internacional
El 25 de marzo de 2015, una coalición internacional dirigida por Arabia Saudí atacó desde el aire al grupo armado de los huzíes en Yemen, desencadenando un auténtico conflicto armado.
Tres años después, el conflicto de Yemen no muestra ningún signo real de remitir. Todas las partes en el conflicto cometen espeluznantes crímenes de guerra y abusos contra los derechos humanos en todo el país, causando un sufrimiento insoportable a la población civil.
Mientras las fuerzas de la coalición bombardean implacablemente desde el aire, las facciones rivales libran una batalla terrestre. Por un lado están los huzíes, grupo armado yemení cuyos miembros son seguidores del zaidismo (rama del islam chií); y, por otro, las fuerzas contrarias a los huzíes, aliadas con el actual presidente del país (Abd Rabu Mansur Hadi) y con la coalición dirigida por Arabia Saudí.
En medio se encuentra atrapada la población civil, con más de 15.000 víctimas mortales y personas heridas, y una crisis humanitaria que crece vertiginosamente.
La mayor parte del mundo lleva tres años haciendo caso omiso de este feroz conflicto y sabiendo muy poco sobre sus devastadoras consecuencias.