Tras sorprendernos con la visita a las pirámides de Giza, llegó el momento de visitar el famoso Museo de Arte Egipcio, tan recomendado y reconocido por todos. Realizamos un primer recorrido junto a nuestro guía que nos fue explicando todo lo que veíamos. Sarcófagos, esculturas, ruinas de templos, columnas, tesoros y mucho más de la historia antigüa de Egipto puede verse en su interior.
Interior del Museo Egipcio, imagen extraída de Wikipedia.org
Lo más sorprendente de todo es el sector donde se encuentran los tesoros de la tumba de Tutankhamon. Esta fue la única tumba que se encontró con su tesoro completo en el interior. La única que nunca pudo ser alcanzada por los saqueadores de tumbas.Para los antiguos egipcios, Tutankhamon fue un faraón de poca importancia, que reinó poco tiempo y no hizo nada relevante. Sin embargo, para nuestra civilización, Tutankhamon es de los más reconocidos faraones ya que el descubrimiento de su tumba es único.
Máscara funeraria de Tutankhamon, por Jon Bodsworth, extraída de Wikipedia.org
En el museo puede verse todo el tesoro encontrado, desde los sarcófagos, los tesoros, sus muebles, herramientas y hasta la famosa máscara del rey. Es increíble ver las diferentes construcciones, materiales, muebles, decoración y joyería que realizaban los egipcios. A veces uno se pregunta si hoy en día somos capaces de realizar lo mismo.El Museo del Cairo nos llevó toda la mañana y fue una experiencia única. Es el lugar donde uno puede tomar conciencia de la importancia de esta civilización que reinó por tantos años. Recomiendo visitar el salón de las tumbas reales, donde uno debe pagar una entrada extra para poder ver a las diferentes momias que fueron encontradas. Entre ellas, se puede observar la tumba de Ramsés II, uno de los faraones más importantes de la historia.
Por la tarde y tras disfrutar del museo, fuimos a visitar el barrio Copto, que es donde se encuentra la mayor historia cristiana de Egipto. Allí visitamos dos iglesias, una sinagoga y recorrimos el barrio a pie. Cuando nos pareció conveniente seguimos nuestro recorrido a la Ciudadela de Saladino, de la época medieval. Allí pudimos visitar la Mezquita de Alabastro, una réplica exacta de la mezquita de Santa Sofía en Estambúl. Es hermosa y de un tamaño que asombra.
Mezquita de Alabastro
Patio interno de la mezquita de Alabastro
Interior de la mezquita de Alabastro
Desde la ciudadela, además, puede obtenerse una vista panorámica de la ciudad de El Cairo desde donde se ven gran cantidad de minaretes. Los mismos indican que allí hay una mezquita y son utilizados para realizar el “llamado a la oración”.La visita al Museo de Arte Egipcio, al barrio Copto, a la ciudadela de Alabastro y al bazar Khan el Khalili es una excursión armada que ofrecen la mayoría de los operadores turísticos del Cairo.