Hay gente que necesita y gente que finge necesidad, hay oprimidos en todas las formas y situaciones posibles y quienes enmascaran la opresión para obtener ventajas personales.
Hay quienes padecen la injusticia y son sus espectadores de privilegio, como otros que claman sus consecuencias sin ser tocados.
Existe el hambre de aquellos que nada tienen, como existe la opulencia disfrazada de necesidad.
Existe el arrepentimiento que yace dócil en los labios del justo, como existe el puñal disfrazado en la manga del hábil traidor.
Nada es a veces como parece y a veces lo que no parece ser, es. El engaño como la verdad muchas veces se disfrazan, el uno del otro, dejándose descubrir solo a los ojos de quienes se atreven a dudar.