Después de la victoria el pasado viernes del Salamanca ante el Girona teníamos a los charros a tan solo un punto nuestro. Ellos habían cumplido en su partido y habían conseguido la victoria. Ahora tocaba al Nàstic hacer lo propio con un Alcorcón que venía a Tarragona, y después de tres victorias seguidas, con la intención de meterse en puestos de play-off.
No se podía fallar y nuestro futuro dependía en gran parte de la victoria ante los madrileños. Otro resultado no era compatible con la permanencia. Empatar o perder era sinónimo de desastre sobre todo de cara a la próxima jornada en que el Salamanca vuelve a jugar en casa y nosotros visitamos el campo del Villarreal B.
El partido se preveía tenso, tosco y con mucho, mucho sufrimiento. Y así fue. Se cumplió el guión previamente establecido. La primera parte fue de domino grana. Sin hacer un gran fútbol se consiguió tener atado al Alcorcón quien solamente dispuso de una jugada de peligro en estos primeros cuarenta y cinco minutos, el resto no inquietó. Una defensa decente, un medio campo peleón y una delantera a la espera de alguna jugada que pudiera llevar el peligro a la meta de Herrera fueron nuestras credenciales. Cuatro fueron las claras oportunidades que el Nàstic dispuso en la primera parte y esta vez sí que se consiguió el objetivo del gol. En dos de ellas el balón llegó hasta el fondo de la red. Primero fue la "pantera de Utrecht", Powel, el pichichi grana, quien consiguió batir de jugada individual a Herrera. Era el minuto 14 y las cosas se ponían bien. Veinte minutos más tarde le tocó el turno al segundo goleador del equipo, el "nano de Sabadell", Eloi Gila, que de cabezazo certero y pegado al palo, a pase de Sanchón, hacía subir un esperanzador dos a cero al marcador.
La segunda parte partía con una clara ventaja en el marcador del Nàstic pero con la incertidumbre del resultado en los aficionados ya que cosas más raras se han visto en el Nou Estadi en las últimas temporadas. El Alcorcón si quería aspirar a puestos de play-off necesitaría hacer algo más ya que hasta ahora poca cosa había demostrado. Y el equipo de Anquela que también lo sabía salió con otro aire. Empezó a ser el dominador del juego y comenzó a tocar el balón con criterio. Poco a poco iba comiendo el terreno al Nàstic y a éste le costaba hilvanar dos jugadas seguidas. El Alcorcón se convirtió en dueño y señor del campo y aunque el peligro se intuía para la meta de Rubén, los amarillos no eran capaces de crear ocasión alguna de gol. Este dominio se incrementó cuando a falta de 25 minutos fue expulsado Mingo por doble amarilla. A pesar de jugar con uno más el Alcorcón seguía sin crear peligro claro y el Nàstic se cerró definitivamente atrás esperando que pasaran los minutos y basándose en un trabajo de desgaste, entrega y garra se consiguió llegar al final del partido con la portería a cero y con lo más importante, los tres puntos que se quedaron en casa.
Siete jornadas quedan para el final del campeonato y una jornada más seguimos a cuatro puntos, más uno del gol-average, del descenso que lo sigue marcando el Salamanca con quien todo parece que nos jugaremos el seguir o no en segunda división la temporada próxima. Siete jornadas en que solamente nos espera una cosa a todos los aficionados: SUFRIR.
Nàstic Rubén, Mingo/Expulsado por 2TA m.65, Álex Ortiz, Mairata, Xisco, Bergantiños, Rodri, Tuni (Álvaro Rey/TA, m.59), Sanchón (Seoane, m.80), Eloy Gila/2-0/TA m.34 (Medina, m.67) y Powel/1-0 m.14
Alcorcón Herrera, Bermúdez/TA, Babín, Rueda, Nagore, Alberdi/TA (Gerardo Carrera/TA, m.57), Fernando Sales, Montañés (Carlos Martínez, m.63), Mora, Borja/TA y Quini (David Sanz, m.53).
Árbitro Mariscal Sánchez, del colegio andaluz
Asistencia Unos 4121 espectadores en El Nou Estadi de Tarragona
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Nàstic-Alcorcón- 2-0 Para la salvación hay que saber sufrir
Publicado el 25 abril 2011 por NasticgranaTambién podría interesarte :