Nàstic-Tenerife- 1-1 Más ocasiones que nunca y misma impotencia que siempre

Si no lo veo no lo creo. No sé cuanto tiempo hace que no veo en un partido del Nàstic tantas ocasiones de gol desperdiciadas. Y si digo ocasiones de gol son ocasiones de gol y no nada que se le asemeje. No sé si es cosa de que tenemos en gafe como una catedral o que no somos capaces de meter un gol ni a un equipo de cadetes. Yo me decanto por la segunda teoría. Queremos mantenernos en segunda y para eso hay que meter goles y visto lo visto, no solo en este partido sino en todo lo que llevamos de temporada, nos vamos directos a segunda B.
Ayer fue un encuentro para acabar tranquilamente tres o cuatro a uno. Fue un partido en que la segunda parte, sobre todo, se tuvieron unas ocasiones de gol tan clamorosas que los más de 7000 espectadores que acudieron al Nou Estadi a la llamada del club se llevaban las manos a la cabeza continuamente por la manera que tenían los jugadores del Nàstic de desaprovecharlas. Son aquellas oportunidades en que se suele decir que es más fácil marcar el gol que fallarla, vamos, que casi sin querer tenía que haber entrada la pelotita. Pues nada de nada. Xisco Campos de cabeza al palo, Eloi Gila lo tenía todo para marcar y envía el balón donde está Aragoneses, Álvaro Rey de fuerte disparo y otra vez el meta del Tenerife la sacó y sobre todo el cabezado de Virgili, que coindició con el pitido final del partido, en que una mano prodigiosa de Aragoneses envitó de nuevo el gol fueron algunas de las ocasiones en que el público cantó gol anticipadamente para luego llevarse la desilusión.
El Tenerife y el Nàstic jugaron en su particular liga de evitar el descenso. El empate final deja a los tinerfeños igual que cuando llegaron a Tarragona y al Nàstic, aunque aumenta un punto más su diferencia con el descenso gracias a una nueva derrota del Salamanca, con una sensación de haber desaprovechado una gran oportunidad de poner "tierra de por medio" y poder estar hoy a seis puntos del infierno. El partido empezó animado con llegadas de ambos equipos a la portería contraria más por los errores de los jugadores que por las jugadas que hacían. En el minuto 27 un disparo flojito pero bien colocado y casi sin querer de Nino sorprendió a la defensa grana y se coló en la meta de Rubén Pérez. A partir de aquí el Nàstic estuvo confuso, más aún de lo habitual, y fue el Tenerife quien controlaba tranquilamente el partido. Se fue poco a poco recuperando el equipo de Oliva del mazazo del gol y empezó de nuevo a llegar a los dominios del Tenerife. Gracias a este pequeño acoso Sanchón colocó el empate en el minuto 44 de partido. Todo hacia presagiar que la segunda parte sería distinta y que lograríamos remontar el partido. Pero no fue así y como ya he comentado anteriormente el no aprovechar las oportunidades de las que dispusimos llegamos al final del encuentro con el empate a uno final.
Nuestro futuro cercano no se puede decir que es esperanzador. Dos partidos seguidos fuera de Tarragona pueden marcar el futuro de este equipo que no acaba de despertar y que está donde está gracias a que hoy por hoy hay cuatro equipos peores que él y que lo demuestran semana a semana. La próxima jornada visitamos a uno de los equipos que más en forma está actualmente, el Elche, y después nos vamos a Huesca donde el equipo local querrá cerrar su permanencia en segunda. Vamos, que como no espabilemos volveremos al Nou Estadi en una situación no dramática, peor.
Nàstic Rubén, Xisco, Mairata/TA, Medina, Mingo, Delporte (Eloy, m.68), Seoane, Bergantiños/TA, Morán (Rey/TA, m.32), Felipe/1-1 m.44 y Powel (Virgili, m.81).
Tenerife Aragoneses, Bertrán, Prieto, Luna/Expulsado por 2 TA, Sicilia, Kitoko, Juanlu, Ricardo, Dubarbier (Omar, m.54)(Julio Álvarez, m.72), Natalio (Igor, m.82) y Nino/0-1 m.27.
Árbitro Del Cerro Grande, del colegio madrileño
Asistencia Unos 7201 expectadores en el Nou Estadi de Tarragona