Fue uno de los primeros nombres que conocí al adentrarme en el mundo de la fotografía y probablemente sea conocido por todos aquellos amantes de la fotografía y el arte que lean estas líneas. Es Chema Madoz, el primer fotógrafo español cuya obra ha sido expuesta en vida en el Museo Reina Sofia a través de la exposición “Objetos 1990-1999″. Ganador de un gran número de premios entre los que destaca el Premio Nacional de Fotografía del año 2000.
Mi respeto hacia su trabajo y su obra es sin duda enorme pues su obra desprende una grandísima calidad y creatividad, pero lejos de ello y tras haberla revisado en un gran número de ocasiones quiero exponerles mi postura de que el trabajo de Chema Madoz no quedaría bien definido como el de un fotógrafo, al menos no en su esencia.
Partiendo de la fotografía Behind Saint-Lazare Train Station (1932) de Henri Cartier-Bresson como una de las grandes definidoras del significado de la fotografía la obra de Chema Madoz no se ajusta a los valores que en ella se determinan.
A través de esta fotografía uno entiende que el valor fundamental de la fotografía es el instante capturado, ese instante que ya no volverá pero que gracias a las cámaras fotográficas perdurará para siempre en la memoria. Un instante que derrocha cualquier fotografía. Un paisaje variará dependiendo del momento en que se saque y de las condiciones que lo rodean que podrán extinguirse o aparecer con el paso del tiempo. Un retrato nos muestra una expresión de la persona en un momento dado, ¿acaso sienten que su vida es la misma hoy que ayer? tampoco lo será su expresión que será única en cada instante. Y así un sin fin de situaciones más, entre los que no dudo en incluir las fotografías de bodegones pues el instante también está determinado por las relaciones entre los distintos objetos.
Sin embargo, la belleza por la que destaca la obra de Madoz no es por las composiciones que establecen sus fotografías, sino por la propia belleza que desprende la creatividad con que están resueltos los objetos y las relaciones que él mismo establece alejadas del instante. En otras palabras, la obra de Madoz no destaca por la superposición de los objetos en un momento dado sino que radica en moldear esas relaciones para hacerlas perdurar hasta la desaparición del propio objeto.
Es cierto que no todas sus obras se alejan de la fotografía. Antes de su famosa escalera Madoz se mostraba mucho más cercano a la fotografía a través de obras que mostraban ciertas características que todavía reúne y que son elementos clave de su magia fundamentada siempre en la ilusión.
Aún después de encontrar lo que supondría su gran aportación al arte a través de la citada escalera, Madoz sigue teniendo obras en las que el instante no deja de ser un elemento clave como esas gotas de agua sobre la chapa o esos cubos de hielo derritiéndose. Sin embargo, sigo opinando que la gran fuerza de su aportación no se encuentra en la fotografía, neutra en la mayoría de los aspectos, sino que lo hace en el arte puro de un artesano y creo que si conocen su obra estarán de acuerdo conmigo en que ansían más ver esas piezas que con tanto mimo ha ido labrando y dando forma, antes que un único punto de vista que deja a uno insatisfecho y con ganas de más.
Quizás por ello su obra sea más asimilable a la de arquitectos como Navarro Baldeweg y Santiago Calatrava cuyas piezas juegan con la ilusión de la gravedad mientras que las de Madoz lo hacen con el de la contextualización (objetualización si prefieren).
No quisiera acabar este artículo sin recalcar nuevamente el gran respeto que tengo hacia su obra, repleta de imaginación y savoir faire. Y quizás, muchos piensen que este artículo se centre en un tecnicismo que no afecta a lo que realmente importa que es el arte y el aporte de conocimientos a la sociedad. Sin embargo, pienso que estos tecnicismos nos ayudarán a entender con mayor claridad que es la fotografía y en que debe estar fundamentada, pues quien quiera romper las reglas deberá conocerlas primero para trabajar con criterio. Por otro lado, creo que presentar esta pequeña reflexión sobre su trabajo es la mejor manera de conocer a ese gran artista español que es Chema Madoz.
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