No me pidas la perfección... xx -aunque sea justa y necesaria- pues lleva mucho trabajo/dedicación. ¡No me da la gana de hacerlo! -¿Qué...? ¡Cómo lo oyes! Es un acto reflejo, un acto lógico en defensa propia/ deshidratante y bestial en la desembocadura de mis aconteceres tribales -jocosos y domésticos...- Tal vez, ese empeño/ ese tiempo espinoso -esponjoso que escatimas...- Sea/fuera más útil, más beneficioso emplearlo en otros menesteres... Además, en segunda persona ya no soy yo, eres tú -siempre de cerca...- Esa mano guía al pescuezo. -¡De cafre, -para aullar-! ¿Y qué haces tú aquí ...me pregunto/ -a todo esto-¿? * Publicado anteriormente 29/ABRIL/19
Revista Diario
No me pidas la perfección…
Publicado el 26 mayo 2019 por Hljorge
Poesía de Lucio Data