Noche de brujas, fantasmas y muertos

Publicado el 28 agosto 2014 por Orperedas
Sin duda alguna todos hemos escuchado historias sobre brujas, fantasmas, seres místicos, algunos incluso muy regionales o locales, y cuando nos hablan de muertos la carne se nos pone como la de las gallinas; pero hay de muertos a muertos, como aquellos de los que habla Mecano en No es serio este cementerio, bastante simpáticos todos, ¿verdad?
Sin embargo hay un grupo de muertos que no sólo nos pusieron la piel de gallina, sino que nos pararon el pelo, nos helaron la sangre y nos dejaron con la boca abierta cuando, en medio de una escalofriante persecución a una joven, les da por bailar al ritmo del pop.
Un tanto extravagantes estos muertos, pues por orden de su líder se hicieron grabar en una, digamos, mini-película de casi 14 minutos, a un costo cercano a los US$800,000.00 en 1983; y claro, la inversión del muerto líder retornó de forma tan abundante que la canción que sirve de base musical para la danza macabra logró vender al rededor del mundo casi 500 millones de copias del disco donde ésta viene incluida y al que le da título.
El director de esta obra maestra de los videos musicales fue John Landis, y el artista que se inmortalizó gracias a esa genial idea de video clip fue Michael Jackson. La canción y el disco son Thriller, que traducido al español significa suspenso, misterio, escalofriante, e incluso se usa como término para clasificar a las novelas de misterio/suspenso/escalofriantes, en inglés.
El video hizo más que la canción en sí, tanto así que según el conteo de MTV, Los 100 videos más vistos, Thriller ostenta el prestigioso Número 1.
Aunque a mis ocho años poco entendía yo sobre videos musicales y me conformaba con saltar y bailar cuando se trataba de algún video de mi predilección, Thriller me dejó pegado a la silla y al televisor hasta que terminó. Mi hermano y yo nos volvimos locos cuando en el Canal 7 anunciaron un programa especial llamado Así se hizo Thriller, incluso lo grabamos en cassete pegando la grabadora a la bocina del televisor, pero no se preocupen, no les voy a poner a escuchar esa grabación.
Bueno, qué más podría decir, el resto supongo que lo saben, no hubo niño de ese entonces que no intentase aprender la coreografía, que sin llegar a ser propia de un contorsionista profesional como las de Jennifer Lopez o los bailarines de Madonna, casi ninguno de los de mi generación pudo realizar bien y completa.
Ahora, después de haber leído por casi 14 minutos, les dejo la mini-película Thriller para que completen media hora de solaz esparcimiento, jajaja!