Si hoy me tocara ser una muñeca sería Barbie Antisexy o la Nancy Hogareña (qué tierna esta última). Y es que si explico mi estampa... Mira, pues la voy a describir. Estoy aporreando el teclado, cliclic, con un aspecto de andar por casa total: camiseta azul y pantalones de pijama muy anchos de color rosa con topos negros, zapatillas (cuyo aspecto no diré, porque una se describe a sí misma pero no es tonta y tiene sentido del ridículo), el pelo recogido en un moño que se asemeja a un nido de pájaro, las gafas de pasta de una de las chicas del un, dos, tres y la nariz enrojecida por los últimos achaques de mi sistema inmunitario de mierda, que finalmente, como buen guerrero, ha vencido al resfriado. Y aunque hoy es viernes, fuera hace un tiempo de verano y sería buena cosa salir, he decidido que voy a quedarme en casa. Nancy Hogareña total, ¿sí o no?
Los que me vayáis conociendo un poco, adivinaréis sin problemas a lo que voy a dedicar esta genial tarde-noche de viernes. ¿A que sí?