¡Hola, amigos!
Los tenía un poco abandonados en este blog cuasipersonal. Es que la naturaleza me recordó que ya no era tan jovencito como creía y eso hizo que me dedicara a cuidar mejor de mi salud.
Descubrí que era diabético tipo II y que mi sistema circulatorio tenía algunas fallas. En realidad, lo descubrieron algunos excelentes médicos que el PAMI y el PROFE pusieron en mi camino. Unos estudios condujeron a los remedios correspondientes y ahora, manteniendo los cuidados, pude volver a la tarea.
¿Qué más podía pedir siendo modelo 44 y con un mantenimiento no bien realizado durante tantos años?
Tampoco me están respondiendo bien mis elementos tecnológicos (PC, WiFi, etc.). Seguramente todo está afectado por las nevadas invernales de las que estamos disfrutando. Pero será cuestión de aguardar la primavera el par de meses que falta para que llegue. Veremos, si Diosito quiere.
Continúo con la tarea que emprendí a comienzos de este año. Ya saben que está relacionada con el sector editorial ("Levantando vuelos") del Complejo Cultural que lleva mi apellido, no por mí sino por mis antecesores y descendientes que lo comparten. Y por los descendientes de mi esposa que no tienen ese apellido pero que quieran sumarse.
Bien. Hoy es un día que dedicaré a solucionar algunos temas organizativos, si todo funciona más o menos bien. Ya veremos.
Y aprovecho para enviarles un saludo afectuoso y agradecerles todo el cariño que me dispensan.