“El gobierno tira la toalla y amplia el techo de déficit de 1.500 millones y permite que la deuda pueda titulizarse en los mercados e incrementa un impuesto del 6% al 7% para las instalaciones fotovoltáicas. Seguimos con una deuda energética de 29.200 millones de euros y el déficit sigue… casi igual.”
Así de claro lo escriben en la revista ENERGÉTICA XXI (podéis leer el artículo entero en el link del final).
Y es que desde el ministerio han hecho una “trampuja más” y es que todo indica que mientras se recorta, sube impuestos, sube el precio de la energía… la contundencia de las medidas del ministerio quedan en entredicho, por lo menos para las grandes eléctricas.
Está claro que todo responde a “Excepcionalidad del sistema eléctrico” que parece que volverá a repercutir en el consumidor.
Está claro que la situación es difícil pero tiene solución. El uso de energías que no incrementen sus precios con la subida de los combustibles fósiles es clave, pero hay otra solución crucial y que debería ser inmediata: EFICIENCIA ENERGÉTICA.
El ahorro que supondrían las medidas de eficiencia están estimadas en un 20% que parece un porcentaje suficientemente importante como para que urjan medidas como la CERTIFICACIÓN ENERGÉTICA de EDIFICIOS o el AUTOCONSUMO y BALANCE NETO. Lástima que para estos asuntos no haya tanta prisa
http://www.energetica21.com/noticia/dnde-estamos-en-la-reforma-elctrica-
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