Cuando escribí el post anterior, retomé un juego que abandoné este verano por múltiples razones que no vienen al caso.Era un cadavre exquis, que titulé ¿Jugamos? y publiqué el verano pasado.Lo dejé inconcluso y prometí retomarlo. Y eso hice en la entrada anterior.Intenté hacerlo lo mejor que pude, pero mi ingenio informático es desastroso.Por eso, muchos de vuestros comentarios aparecieron en el post del 23 de agosto del año pasado, y los demás, de manera inconexa en el de ayer 20 de junio.Por lo cual, os pido mil disculpas a todos. Intenté arreglarlo pero no lo logré.Y es un follón intentar seguir con algo racional!!! JajajajajEspero, contar con vuestro perdón, vuestra paciencia e indulgencia para conmigo , para volver a intentarlo de nuevo.No dije que me fuese a ir, sólo os comenté que necesito un hasta pronto, no sé si largo, corto o infinito. Y entraré cuando pueda a leeros y a comentaros.Mis huesos están pelín bordes conmigo últimamente, y aquí pese a la llegada del verano, el otoño es una estación perenne.
Así que si os parece... ¿lo intentamos de nuevo?¿Cuento con vuestro beneplácito? Espero que aceptéis mis disculpas, y mi torpeza informática.
Os propongo, una nueva historia...
Yo iniciaré un relato con la primera frase, y luego vosotros en vuestros comentarios iréis hilvanando la historia. Para seguirla, os inspiraréis del comentario justo anterior al vuestro. Yo cerraré la historia ( o alguno de vosotros) y publicaré el texto en su totalidad.
¿Empezamos de nuevo???
Aquí va el inicio...
Rodrigo llegó cansado aquella noche a casa. Los cincuenta largos le pesaban en los hombros. El calor torrencial del inicio de verano, 37º y medio, lo dejaba anonadado. Se deshizo el nudo de la corbata, se descamisó, encendió el ventilador, la pipa de fumar, y se quedó con sus Calvin Klein (pese al dolor que le provocaban en la sisa...) y su mente voló hacia la sensual boca de Amanda...
C´ est à vous!!!!