La semana pasada estuve unos días en Padova -o Padua, como prefiráis-, una pequeña ciudad situada cerca de Venecia. Además de pasear y leer y andar en bici y tumbarme a la bartola, hice un poco de turismo. No tenía guía ni había leído mucho sobre la ciudad, pero en la página web Turismo Padova encontré una serie de mini audioguías que me acompañaron en mis visitas a la Basílica de San Antonio, al Prato della Valle, a Piazza dei Frutti...
Padua es una ciudad pequeñita y cuidada, con adoquines, puentes, canales, donde la gente va en bici y se tumba en Prato della Valle, una de las plazas más grandes de Europa, a tomar el sol. Está llena de estudiantes universitarios que por la tarde se reúnen en Piazza delle Erbe y Piazza dei Signori para tomar un spritz (yo no quise perdérmelo, lo pudisteis ver en twitter y en instagram).
Dediqué una mañana a pasear por el Jardín Botánico de Padua, el más antiguo del mundo. Un sitio perfecto para refugiarse del calor y descubrir un montón de plantas extrañas.
Me quedaron pendientes cosas tan importantes como la Cappella degli Scrovegni (para la que hay que reservar entrada con al menos un par de días de antelación) pintada por Giotto, el famoso Caffè Pedrocchi o el Palazzo del Bo, edificio de la Universidad en el que Galileo daba clases de física. Pero vamos, que en mi próxima visita me pongo al día.
¿Conocíais Padua?