A pesar de lo extraño que resulta trabajar para la Agencia Internacional de Contención de lo Paranormal, Evie se precia de ser normal aunque pueda ver las auras de los paranormales tenga una amiga sirena y un ex novio hada que, además, es lunático.
Pero en un mundo en que los paranormales se controlan, Evie siempre ha sentido una cierta tranquilidad al saber que ella es humana...
Hasta que descubre que no lo es.
Evie vive tranquilamente con la AICP sin plantearse ninguna duda, ningún cambio, hasta que aparece Lend, un chico de su edad, un paranormal que cambia de aspecto a placer, y es él quién le hace preguntarse quién es ella realmente, qué es, por qué ve a través del glamour de los paranormales. Hasta ese momento Evie sueña con ir al instituto, a la universidad, pero acepta sin protestar cuando Raquel (la jefa y especie de tutora) le dice que no puede ser. Por su parte Lend se encuentra en la situación en la que está, porque busca respuestas a sus preguntas.
"Él me puso una mano detrás de la espalda, para que me acercará más a él y luego me recorrió la mandíbula con los dedos. Yo estaba a punto de sufrir un ataque al corazón, casi asustada de que el beso que había soñado durante tanto tiempo por fin se produjese. Nuestras labios estaban a escasos centímetros de distancia. Entonces se puso serio y nuestras bocas dejaron de estar separadas"
Pero ya casi al final la cosa se va poniendo más y más interesante, y nos deja con casi las mismas dudas que teníamos al comienzo del libro pero ampliadas e interesantes.
En resumen, gusta pero no encandila, es una lectura interesante con unos personajes a los que les falta algo más, los chicos malos son impecables, fantásticos, desafiantes, los buenos son sólo buenos.
Habrá que esperar a Supernaturally para ver cómo evolucionan las cosas.
En cualquier caso las portadas son fantásticas ;)