Parece que harto y farsa a algunos les suena un poco basto (que no vasto), como decir mardito en vez de maldito, o arguno en vez de alguno. Pero podríamos decir perfectamente que un tipo es harto alto.Lo que sí que resulta harto inapropiado es encontrar confusiones entre palabras similares en un crucigrama, nada menos. Pero la encontré, un tórrido día del pasado verano. El crucigrama daba una definición que encajaba con la palabra enjuagar, pero lo único que cabía en las casillas era enjugar. Verbos que no sólo no significan lo mismo, sino que son prácticamente lo contrario, pese a su gran parecido físico:enjuagar: limpiar con un líquido; lavar ligeramente; aclarar y limpiar con agua.enjugar: quitar o absorber la humedad superficial; secar.O sea que si lavamos algo, primero lo enjuagamos y luego lo enjugamos, fíjate.
Y ya que hemos topado con 'absorber', hay que reconocer que también tiene muy mala idea la pareja formada por absorber y absolver.
absorber: chupar, empapar, aspirar; atraer, fascinar.
absolver: declarar libre de responsabilidad penal al acusado de un delito; exculpar, indultar, perdonar.Lo que no tiene perdón es la confusión, mil veces producida, entre nobel y novel. El ejemplo más reciente lo encontré viendo un trailer de una película en el que aparecía el rótulo “del director nobel…”, como si le hubieran dado al señor un premio de la Academia sueca.Que no digo yo que no se lo merezca, eh, pero el caso es que el director era novel, que viene a ser lo mismo que novato:nobel: Premio otorgado por la fundación sueca Alfred Nobel; persona o institución galardonada con este premio.novel: que comienza a practicar un arte o una profesión, o tiene poca experiencia en ellos.Aunque algunos, como Obama, son capaces de rizar el rizo y ser al mismo tiempo novel y nobel: presidente novel y nobel de la Paz. Ahí es nada.