En nuestro repaso por algunas zonas del Parque de la Naturaleza de Cabárceno, entramos hoy con las jirafas.
Cabárceno cuenta con cuatro ejemplares de variedad Rothschild, originales de Kenia y que están en peligro de extinción. En este sentido, el parque ha sido elegido para colaborar con el EPP, Programa Europeo para las Especies Amenazadas.
Concretamente, el nombre de estos “chicos” son: Pepe, Moreno, Zapatones y marco. Solo hay machos en el recinto, ya que la inclusión de una hembra, supondría que el resto de machos luchasen entre sí por ella. Y por tanto, tendrían que ser separados.
Su nombre genérico proviene del árabe ziraafa que significa alta. Es el animal terrestre más alto del mundo, llegando a alcanzar los 5 metros y un peso de 1500 kilos. Su hábitat natural son sabanas, pastizales y bosques, y su alimentación es puramente herbívora.
Si algo es característico de este animal aparte de su altura y sus largas patas, son sus manchas. Con un patrón único por jirafa, son el mejor sistema para identificar a cada una de ellas, dentro de una manada.
Vive en pequeños grupos liderados por un macho adulto, las hembras con sus crías y otros machos de corta edad.
Los machos, tienen un peculiar sistema de establecer su jerarquía, conocido como necking o estrechamiento. Haciendo uso de sus cuellos para combatir entre ellos por aparearse con las hembras. (“Neck” en inglés significa cuello).
A pesar de lo apacibles que se presentan en el parque, parece que son animales complejos y con cierto sentimiento de superioridad, al no tener apenas depredadores en su lugar de origen (según palabras del veterinario Santiago Borragán). Por su altura, es complicado para los depredadores atacar a jirafas en buen estado, ya que sus patas pueden lazar patadas de gran impacto.
FICHA
Peso: 950 a 1500
Altura: 250 a 500
Gestación: 15 meses
Herbívoro, diurno, vivíparo
Por Luis A. López Fotografía (Señor L)