Parque Nacional de Monfrague.- Extremadura.- España

Publicado el 19 enero 2015 por María José Luque Fernández @sonrisasdecamaleo

Me produce un poco de tristeza volver a este lugar y no poder caminar por los senderos que tan gratas sensaciones produjeron cuando su protección no iba más allá de Parque Natural.

Ahora, desde hace relativamente poco tiempo,  son zonas protegidas y no se puede acceder a ellos.Miradores secretos, especialmente ideales para poder observar y fotografiar a los buitres negros.


Atalayas desde las que la vista sin problema alcanzaba a divisar al zampullín distinguiéndolo por su elegante silueta y su cuello largo, mientras bucea en las claras,  a veces verdes aguas enjauladas del río Tiétar,  acompañando a los cormoranes  que toman su delicioso baño de sol posados en unas ramas o en las rocas,  en cualquier zona del curso del río.Recovecos del río aún sin embalsar donde las nutrias se esconden del importuno, molesto visitante. 

El ciervo pastando tranquilamente en primavera o peleando bruscamente durante el otoño en la berrea.La Cigüeña negra incubando en su nido, lugar secreto que jamás desvela,  cuando su pareja sale a buscar sustento, esquiva del ruido y el gentío. A veces,  arruinados por los continuos llenados, dicen que mal gestionados, del embalse de alcántara.El pequeño o gran lagarto, con su lindo verdiazul  tomando el sol,  escabulléndose entre los matorrales o las rocas en cuanto un descuido denota nuestra presencia.Acercarte a la orilla del embalse, ahora inaccesible y frente a las montañas esperar con impaciencia que el Martín pescador te deslumbre con su arte y sus colores, mientras  saca del río su atesorado sustento.El lindo elanio azul, esa pequeña rapaz que nos sorprende, con su cola en alto,  en la rama del olivo buscando algún pequeño mamífero o reptil con que llenar el estómago.Caminar entre la jara común y la jara pringosa, cuya resina, el ládano antiguamente usada como bálsamo medicinal, hoy curiosamente es utilizada como fijador. 

Deleitarse la vista en primavera cuando se poblan de flores rosas unas, blanca las otras.Un verdadero bosque mediterráneo con su encinas, alcornoques, acebuches, fresnos y alisos.Cruzar uno de sus puentes de madera,  en un antiguo sendero,  inundados, con las aguas a nivel de la cintura, sólo por el placer de  querer hacerlo, mientras  divisas el nada atractivo sapo corredor en las arenas  de las orillas.Subir la pendiente que nos separa de la cumbre donde se encuentran las ruinas del castillo, atravesando  un espeso bosque de  quejigos, alcornoques, madroños y brezos y  sentir sobre nuestras cabezas el  vuelo del asombroso  Águila imperial.

En la noche entre las sombras, el canto del búho real, las ramas que crujen por doquier, las ranitas de san Antón que  salpicando el agua reclaman nuestra atención, el olor penetrante de un zorro que se intenta escabullir.Un sinfín de rincones, paisajes, aves, mamíferos, reptiles, un lugar que debes descubrir caminando despacio y con todos los sentidos en alerta para disfrutar y deleitarte de todas y cada una de las maravillas que te ofrece este lindo lugar.DATOS PRÁCTICOS:

El Parque Nacional de Monfrague está situado en la Comunidad Extremeña,  en la provincia de Cáceres. Su acceso es fácil desde Cáceres, Navalmoral de la Mata, Trujillo o Plasencia.

El Camping de Monfrague, un lugar tranquilo donde pernoctar en armonía con la naturaleza.

Cenar en cualquier pueblo de los alrededores, no dudes que te brindarán su hospitalidad y alojamiento.Comer, igual, pero lo mejor es llevar en tu mochila un bocadillo, unos frutos secos, fruta, algo dulce, chocolate por ejemplo y  completar tu jornada en el interior del parque.Podéis visitar el museo y el centro de visitantes, si no conocéis el lugar, os pueden dar una pequeña visión del parque y explicaros algunas de las rutas que podéis realizar.

Unas botas mejor que deportivos, hay muchos guijarros en los senderos. 

No olvidéis llevar agua. 

Si os acercáis en verano, recordar que hará mucho calor, por tanto nuestra mochila deberá llevar también:  Protector solar y gorra.

Los mejores momentos, a mi parecer, en la mañana temprano y en la tarde, cercano al anochecer.

Podéis curiosear por aquí: http://www.magrama.gob.es/es/red-parques-nacionales/nuestros-parquesTexto y Fotografías realizadas por María José Luque Fernández.