Cuando algo se nos rompe... cris-cras.
Ni los japos serían capaces de re-construirlo con su belleza... Kintsugi o Kintsukuroi.
Nada es capaz de reconstruir los pedazos del alma.
Lo mejor es irse, dejarnos ir, fluir... Y tapizar el olvido con los recuerdos de un nuevo reverdecer a flor de piel.No hay otra.Regodearse en lo que fue, es tiempo perdido, y por la cuenta que nos trae, más vale gozar lo que nos queda.