Esperar significa "tener esperanza, creer y desear conseguir esto o aquello". Esto sólo construye una ventana sin llave alguna (porque no hay camino de vuelta a un lugar que nunca se ha visitado).
Esperar solo lleva a lo que los idealistas, de seguro, hubieran bautizado "futuro"; olvidando que lo único que tenemos bajo la manga es a lo que un realista decidió llamarle: "presente"
Cuando sonreir no es suficiente durante la espera, es cuando llega la hora de darse cuenta que se ocupa DESAPARECER.
No huir, solo desaparecer.
Tampoco esconderse.
Se trata de seguir en el mapa.
El plan es muy sencillo y no se requiere estrategia para lograrlo.
Respirar nunca resultó tan fácil como cuando se desaparece.
Se trata de no mirar más los caminos de vuelta (para eso está aquel portón abierto)
Se trata de ir bailando o jugando entre telas.
Se trata de ir haciendo un croquis para no dar más vueltas en círculos.
Se trata de disfrutar de las sorpresas del laberinto mientras se encuentra algo, aunque sea al fauno.
Desaparecer es declarar la independencia.
Es soltar esa cuerda mal amarrada que alguien dejó adrede.
(nadie deja un nudo suelto sin querer)
Desaparecer, sin esconderse, es devolverse a si mismo la valentía de salir al mundo con flores en la cabeza y un monton de amaneceres en el bolsillo.
Es tomar esa cuerda y hacer una trenza de colores que sirvan de recuerdo y aprendizaje,
(nadie nos prohibe ser creativos inoportunamente)
Desaparecer es, no mas ni menos, que dejar de esperar pero seguir sonriendo sin necesidad de aceptar ni negar una historia porque al fin de cuentas seguís siendo protagonista.
Paso #4: completado!