Angustias explotaba cuando veía miguitas en el cuarto de su nieta, pensando que la niña se atiborraba a escondidas. Lo que ella no sabía es que robar esas galletas permitía a la pequeña encerrar dentro del armario al monstruo que la atormentaba todas las noches.
—¡Cuándo comprenderá que es celíaca!
Angustias explotaba cuando veía miguitas en el cuarto de su nieta, pensando que la niña se atiborraba a escondidas. Lo que ella no sabía es que robar esas galletas permitía a la pequeña encerrar dentro del armario al monstruo que la atormentaba todas las noches.
Angustias explotaba cuando veía miguitas en el cuarto de su nieta, pensando que la niña se atiborraba a escondidas. Lo que ella no sabía es que robar esas galletas permitía a la pequeña encerrar dentro del armario al monstruo que la atormentaba todas las noches.