¿Por que he dejado de escribir sobre ti?

En verdad no he dejado de hacerlo, sin duda la historia mas mágica de mi vida, la parte mas fundamental y el motivo de que sea quien soy y como soy hoy en día, ¿Como dejarla a un lado?. He escrito largo y tendido al respecto, me encanta ver como los años cambian mi perspectiva, como soy capaz de ver la misma anécdota desde puntos de vista diferente, no me duele recordar esos años, evidentemente los recuerdo con nostalgia, pero no vuelvo a ellos para castigarme, al contrario, vuelvo a ellos por que me hacen feliz, por que me llena de alegría saber que tu y yo hemos evolucionado como personas y que compartimos un pedazo tan importante de nuestra vida juntos, decidiéramos hacer dicho camino de la mano. Me encanta que tu lo leas y me des tu opinión.

A su manera me ha hecho muy feliz exponer mis recuerdos como si de una entrega por fasciculos o capítulos se tratase y como he dicho varias veces, tengo cientos de post sin publicar, no espero a nada en concreto ni tengo un sesudo e intrincado método de publicación ni mucho menos, simplemente publico cuando estoy de humor y cuando siento que debo hacerlo, cuando sucede algo en mi día a día que me hace recordar el pasado, momentos similares o enseñanzas y anécdotas que me evocan a dicho momento y me dan fuerzas para superarme y ser mas fuerte.

No se cuando volveré a publicar, mañana, dentro de un año, dos… quizás esta plataforma deje de existir, quizás poco a poco nos vallamos volviendo mas gilipollas y dejemos de leer, quizás la inteligencia artificial resquebraje nuestras vidas y perdamos la pasión por las viejas artes y nos abandonemos a que nos lo den todo bien masticadito y la pasión de leer sea una utopía y solo escuchemos una voz metálica narrándonos un libro de fondo como banda sonora de nuestras vidas sin tener la pasión de tocar un libro, de sentir y oler sus páginas… quizás yo mismo no sea el mejor ejemplo y también poco a poco cada vez leo menos, pero cuando lo hago sigo disfrutando como el primer día, no es una pasión que desaparezca con la irrupción de la tecnología. Pasaran 40 años y nuestros hábitos y costumbres cambiaran hasta el extremo y aun así yo no me cansaré de escribir, publicar o no es otra cuestión, pero jamas me cansaré de escribir sea el soporte que sea, lugar o momento, lo seguiré haciendo y sin duda alguna seguiré escribiendo de ti, para recordar, para que me leas y para que nos riamos, para que recordemos.