Como es tan organizada y planimétrica tiene apuntado todo lo que tiene que hacer y comprar organizado por colores: los pos-it de color rosa son los regalos de reyes, los azules los de Papa Noel, los verdes de la amiga invisible, los naranjas la compra de nochebuena, los morados la compra de navidad, los grises la de noche vieja y los blancos la de año nuevo, en reyes !gracias a dios¡ va de invitada.....me basta echar un vistazo a su cocina para exclamar
¡¡¡Cómo me gusta la navidad!!!:(
Pero no lo hace todo sola, siempre tiene algún pinche en la cocina con ella que, la verdad, más que ayudar se dedica a tocarle las narices, da igual de una familia que de otra, en ambas el pinche no sabe dónde está nada ni cómo funciona nada por lo que además del trabajo de cocinar tiene el otro, el de enseñar donde está todo, el de andar justificando que hace un tenedor sucio en el cajón de los cubiertos o el poco brillo que tienen las copas de vino, que no es suciedad es que ya están ajadas (si supieran el trote que llevan....) y aun así sigo diciendo..... ¡¡¡Me encanta la navidad!!!:§Esta Mum tiene más paciencia que el Santo Job!! Además de la cocina se pega todas las fiestas cambiando de disfraz, tan pronto la ves metida en el papel de burro de carga arrastrando toneladas de kilos de compra por el suelo del garaje hasta el ascensor como de finalista en máster chef dándolo todo en la cocina e intentando emplatar como en un restaurante de alto standing, ahora de espía capturada a la que le están estrujando el cerebro para que cante cual es el mejor regalo para su amigo invisible, o de Papa Noel pero sin duendes, ni renos, ni trineo que le ayuden y para finalizar como todos los años
¡el apoteosis! acaba desdoblándose en tres.....¡¡¡Ojala fuera navidad todo el año!!!:0
Y como toda alteración de la rutina, estas fiestas también tienen sus consecuencias, los efectos colaterales de tan entrañables fechas pueden aparecer desde:- 10 días después en el caso de los langostinos, restos de paté en panes ya blandos y sobras de embutido raro, turrones, peladillas que da pena tirar y que se convierten en menú principal, - la sensación de -" cuan gilipollas soy"- dura hasta que se me olvida que me he pateado la ciudad de cabo a rabo montada en Bolero a 1º C bajo cero para satisfacer los deseos de los demás y mi regalo ha sido una olla o una batidora, una plancha o un grifo de cocina,- incluso ha habido años que los efectos colaterales los hemos sufrido hasta un mes después como consecuencia de un momento de subidón navideño en el que exclamaste : -"va!! Este regalo lo pago con la visa y el mes que viene dios dirá!!"- y el mes que viene llega y dios no dice nada así que lo pagas tú......¡¡¡¡Que reguero de felicidad deja la navidad a su paso!!!!