Amores que llegan y se van sin avisar, heridas, vacíos, enfermedades, caídas, pérdidas, caminos que se abren, puertas que se cierran, circunstancias que afrontar, decisiones que tomar… todo ello invade nuestra mente, llenándola de preguntas inciertas que no encuentran respuestas, nos llenan de angustia y se convierten en la piedra en el zapato que no nos deja seguir.
No hay mas opciones que vivir, seguir, creer,
no perder la esperanza de que vendrán tiempos mejores
que compensarán las luchas que hemos asumido con fuerza,
sin renegar por todo, sin rendirnos, sin renunciar…