Ya no estoy aquí, mi cuerpo está presente.
Mi corazón y mi mente están lejos.
En un lugar donde no puedes tocarme, estoy muy lejos.
Tan lejos que no puedo encontrarme.
En ese lugar, puedo amar y soy amada,
mi cuerpo responde al amor y mi sexo experimenta sensaciones desconocidas.
Tu no puedes tocarme, tampoco quieres, tienes un sitio donde estar,
donde tienes tu amor y tus deseos.
No podemos amarnos, estamos muy lejos, cada uno en su sitio ideal.
Una vida y un mundo diferente, donde amamos, donde tenemos nuestras mentes
y nuestros corazones buscan a quien amar.
Podemos vernos pero no tocarnos.
podemos hablar, pero no comunicarnos.
Estamos muy cerca y muy lejos, presentes y sin embargo ausentes.
Somos dos almas vagabundas buscando donde encontrar un nido.
Belisa Lucha