Revista Literatura
Existen cosas que un hombre no debe jamás olvidar ni tampoco traicionar: el honor, los códigos, la fe propia y aquella que otorga a los demás, la confianza, la convicción, el coraje, la compresión y la creencia en sus propios sueños. Solo así, construimos los peldaños de un gran destino o nos sumergimos en las marismas eternas y turbias del olvido. Claudiogia