Desde luego, no hay más que leer el título de esta entrada para darse cuenta que hay publicidad que cala hondo entre nosotros. Quién no recuerda aquello del Polo con Ziritione (si hay alguien que averiguara la verdad a cerca de esto, que lo diga)? O eso de "tú el pronto, yo el paño"?
Reconozcámoslo, entre Giropas, tíos cachas en la oficina a la hora del café y forzudos calvos con aroma a limón hace tiempo que perdimos nuestro libre albedrío pues, aunque pensemos que nuestras compras son única y exclusivamente fruto de nuestra voluntad, nada más lejos de la verdad.
Sin embargo hay diferentes tipos de publicidad de más o menos calado (ni que hablara de la pesca del atún) y de más o menos fiabilidad. Así, la mejor publicidad es aquella que te permite probar e interactuar con el producto y la peor, a mi modo de ver, entendiendo como mala no la que no sea efectiva sino aquella que daña el alma, la que te hace desear algo que nunca jamás en tu p"#a vida así vivas cien años y te toque diez veces la loto vas a poder alcanzar.
Será por eso que yo cada día leo más blogs y menos revistas, a excepción de la Qué Leer que ayuda mucho a la hora de saquear la Biblioteca Municipal. El caso es que, para enterarme de novedades, productos que funcionan y demás poticotilleos suelo servirme de tres vías:
1) Vosotras, queridas amigas bloggers
2) Horas y horas de pasearme por perfumerías
3) Vosotras, mis queridas amigas no bloggers.
De hecho gracias a esta tercera vía conocí el primero de los dos productos de los que voy a hablaros, la BBcream Roll-on Ojos de Garnier, que me vino muy bien recomendada por mi tía Marisa (un besito, guapa)
Se trata de una cremita con color ligera que viene en un envase con un aplicador en Roll-on y que, como contorno de ojos no sé pero como corrector me está funcionando a las mil maravillas. Mi problema en esa zona es que casi cualquier corrector de los que tengo me acababa resecando y marcando mucho los pliegues por lo que, teniendo en cuenta que no tengo muchas bolsas ni ojeras, casi había descartado este producto por completo.
Sin embargo, sí que es verdad que cuando usaba maquillaje me daba no se qué no terminar de cubrir bien esa zona y este producto ha resultado estupendo para tal función. El producto en sí es líquido,con una consistencia bastante elástica y una cobertura media por lo que acaba fundiéndose de maravilla con la piel y dejando toda la zona más iluminada pero con un acabado natural.Además, me parece que aguanta bastante bien el paso del tiempo porque, a mí que no suelo sellar el corrector por el tema de la sequedad, me está aguantando perfectamente incluso estos días de calor.
Eso si, sólo existen dos tonos y el más claro puede resultar un tanto oscuro a las pieles más blancas o rosadas, aunque, como funde bien, todo es cuestión de probar. Por otra parte, la única pega importante que le puedo sacar es el tema del roll on ¿alguien de verdad lo usa así? Porque yo, desde luego, lo probé el primer día y no se me ocurre producto menos adecuado para aplicar con este formato. Lo bueno es que tampoco es mucho problema porque puedes sacar el producto apretando el envase para luego aplicarlo con el pincel de corrector que más te guste.
El precio de esta BB cream Roll On Ojos es de 10'99 el envase de 7ml.
Visto el buen resultado de este primer producto no pude evitar que la BB Sun de Delial (que también es de Garnier) saltara a mi cesta mientras hacía la compra en el super. No es que tuviera necesidad de otra BBcream, la verdad, pero costaba unos 12 euros y no pude resistirme (además que alguna compensación tenía que tener el hecho de chuparme veinte minutos de cola en la carnicería, no?).
El caso es que con este otro producto me ha pasado una cosa muy curiosa: no tiene tratamiento, apenas cubre y no creo que el nombre de BBcream le vaya muy bien pero, no obstante, me encanta. Para ser sincera creo que uno de los motivos por los que me esta gustando tanto es porque me esperaba que fuera una hez y, claro, cuando el listón está bajo es fácil superarlo.
No, fuera bromas, me parece un producto muy bueno siempre y cuando lo entendamos como lo que es, una crema solar con color. En primer lugar, tiene protección 50 por lo que es adecuada para el veranito pero es que además yo creo que está pensada para ir a la playa porque, aunque no es waterproof (o al menos no pone nada en el envase), aguanta estupendamente el sudor.
El segundo factor positivo es que deja muy bien la piel, ni grasa ni reseca, y con muy poquitos brillos de tal manera que la podemos usar tal cual para irnos a tomar el sol o, como es mi caso, cuando salgo a andar (sí, sí, a mi también me ha llegado la hora de hacer un poco de cardio).
Por último, algo que en un principio me echó para atrás como el color oscuro que tiene, ha resultado ser un aspecto positivo pues es una ayudita contra mi cadavérica palidez natural. Es cierto que al aplicarla el tono se me hace un tanto artificial pero una vez bien extendida parece como si el color se asentara, dejando un halo broncíneo muy favorecedor.
Por lo tanto no puedo más que quitarme el sombrero ante esta creación de Delial que, aunque no ha desbancado a mis BBs asiáticas ni a mis bases europeas, se ha consolidado como un must de mi bolsa de playa (esto es una metáfora porque es más bien un básico de la mochilita de Decathlon con la que salgo toda pintas a hacer la ruta del colesterol por La Concha).
Espero que os haya gustado este entrada y, ya sabéis, no dudéis en compartir los productos que os hayan gustado.
Besitos
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