¿qué le pasa al gobierno?

¿QUÉ LE PASA AL GOBIERNO?. 

Escrito por: Luis García Miró Elguera. Director del Diario Expreso. 

Recordemos los años del régimen inconstitucional, antidemocrático y golpista de Velasco y compañía. Épocas aciagas que apoyó brutalmente la izquierda peruana. El Estado fue secuestrado por el socialismo, manejando desde los sindicatos a los medios de comunicación, pasando por la agricultura, industria,minería, pesca, etc. Las huelgas políticas eran la estrategia clásica para acabar con determinadas empresas, llevándolas al límite del colapso para que sus propietarios terminaran entregándolas a las fauces del Estado todopoderoso, perverso, desincentivador de inversiones, procurador de favores para los “empresarios” oficialistas, demagogo, asistencialista, cleptómano, y donde el vocablo éxito era sinónimo de expoliación. El monopolio estatal era moneda común. Petróleo, teléfonos, energía eléctrica, puertos, aeropuertos, la pesca, la minería, etc. El Estado lo tenía todo. Y todo lo hacía mal. La mediocridad administrativa acumuló una deuda pública escondida de proporciones tectónicas. Al final del día, el Estado tuvo que asumir un pasivo colosal trajeado de deuda externa. Una obligación que empujó al Perú a una etapa de implacable fiscalización del FMI, el Banco Mundial, el BID, el Club de París, la banca privada internacional, etc., convirtiéndonos en una auténtica nación enferma, a la que esas instituciones decidieron exhibir como el paradigma del mal, para que el resto del planeta aprendiera aquello que precisamente no deben hacer los países si quieren que sus sociedades gocen de estabilidad, progreso, libertad. Todo ello en realidad nos costó sangre, sudor y lágrimas durante década y media, tanto por el desembalse inflacionario como por el surgimiento del terrorismo.

Hoy, lamentablemente, reaparece el monstruo de mil cabezas llamado estatismo. La trova cubana del chavismo lo ha revivido a nivel regional. Y hay partidos –como el nacionalista en el Perú– que pretenden reincrustar ese cáncer en nuestro país. La primera clarinada estriba, por un lado, en el ensayo de modular la candidatura marital para 2016, y asimismo en la propuesta de compra de las operaciones de Repsol por parte de Petroperú. Para esto último –que implica el monopolio de los combustibles, la corrupción, el ogro estatal, y el dispendio de los impuestos– el Estado destinaría US$500 millones en efectivo y otros US$1,500 millones en pasivos que asumiría de operaciones pendientes de la empresa española. Pero si no hay dinero para equipar a la Policía en medio de una violentísima oleada del crimen organizado que asesina, viola, roba, extorsiona impunemente a la sociedad; si no existen recursos para ampliar las cárceles y evitar que sigan siendo centros de operación de aquel crimen organizado que abate al país; si no hay con qué pagarle 700 soles a los reclutas que van camino a la muerte en el Vraem; si los colegios nacionales siguen cayéndose a pedazos. Si no hay dinero para todo esto, ¿cómo hay US$2,000 millones para que Petro compre Repsol?

FUENTE: DIARIO EXPRESO. http://www.expreso.com.pe/el-mundo-al-reves/que-le-pasa-al-gobierno