"Nole, ¿te parece bien turnarnos el Nº1 en 2014?"
[#1] Rafael Nadal: Todo es felicidad en la vida de Rafa Nadal. Totalmente recuperado de la lesión, diez títulos conseguidos durante el año, -entre ellos dos Grand Slams- volver a hacer frente a los mejores del circuito y recuperar el número uno tres años después, algo inédito. Ni en el mejor de los casos se esperaba el balear tener tantas buenas noticias en 2013, pese a finalizar el año cediendo la Copa de Maestros ante su archienemigo serbio. Por lo que en su carta a Papá Noel solamente se ha centrado en un deseo: que le respeten las lesiones. Cualquier mal físico en el cuerpo del español, y más a estas alturas, significaría perder un año de tenis. Y ya sabemos cuán reducida es la carrera de un profesional en este oficio. Después de modificar su manera de jugar y de rozar el mejor tenis casi desde que debutara por el año 2000, Rafa sabe que estar bien físicamente significa tener el 50% de la batalla ganada. Descanso, buenos alimentos, mucho fisio y por supuesto, algo de suerte. Esperemos que Noel se encargue de ésto último.
[#2] Novak Djokovic: A estas alturas de la película no hay nada que le quede por demostrar a Novak Djokovic. Su espíritu competitivo, su tenis, sus estadísticas y esa ambición que posee en la mirada bastan para encuadrarlo como uno de los mejores de la historia. Sin embargo, el serbio sigue teniendo una espina clavada, una mancha en el palmarés, su kryptonita particular. Se halla en París, el lugar es la tierra batida y su nombre es Roland Garros. El segundo Grand Slam del calendario se le sigue resistiendo al balcánico, que nunca ha logrado llegar a la final del torneo francés. Por eso el serbio, en su carta al 'gordito de los regalos', le desea un fuerte y profundo dolor de estómago a Rafa Nadal en las semanas que van del 26 de mayo hasta el 8 de junio, aquellas en las que el balear partirá como favorito hacia su noveno entorchado en la capital gala. Si esto no fuera posible, la vuelta a lo más alto del ránking ATP tampoco sería mal regalo.
[#3] David Ferrer: Con 32 años y después de haber derrumbado todos los muros habidos y por haber pese a sus limitaciones, el alicantino David Ferrer afronta la nueva temporada con la misma humildad y corazón que siempre. Sabe que hay ciertos jugadores ante los que no se puede toser y seguramente toque agachar la cabeza al final del partido. Pese a ello, él continúa trabajando y obteniendo resultados: número tres del mundo al finalizar el 2013, sólo por detrás de las dos bestias más en forma del circuito.Tras la noticia de última hora en la que el de Jávea anunció que su ex entrenador, Javier Piles, dejaba de ser su compañero profesional en el circuito, "Ferru" le pide a estas Navidades la mayor complicidad posible con José Francisco Altur, su nuevo coach. De esa relación dependerá el buen fruto que coseche David en el nuevo año.
Fin a 77 años de maldición británica
[#4] Andy Murray: El mundo del tenis sabía que tarde o temprano el 'fenómeno Murray' iba a estallar. Aunque de esto ya hace tiempo. Fue en 2012 cuando el escocés hiló los JJOO de Londres junto al Us Open, su primer Grand Slam después de haber perdido cinco finales consecutivas. En este año, a lo ya nombrado, sumó aquello que la vida le había estado guardando tanto tiempo, a él y al pueblo británico. Wimbledon fue, sin duda, el punto de inflexión en la carrera de Andy, un secreto a voces que colocaba al de Dunblane en un escalafón mayor, capaz de batallar con cualquiera y de lograr lo que se proponga. Gran parte de culpa de este éxito está en la figura de su entrenador, Ivan Lendl, la persona que le ha enseñado a renovarse en la pista y superarse a sí mismo.A punto de cerrar este año y pasado ya el calvario de la lesión que le privó de jugar el último trimestre del curso, Andy le pide a Papá Noel aumentar, pero sobre todo mantener, esa mentalidad y personalidad que lo llevaron en 2013 a causar miedo a sus rivales y callar a sus más críticos. Si consigue dejar los miedos atrás y llevar el peso de cada partido, le espera una gran temporada por delante.[#5] Juan Martín Del Potro: Todos los especialistas en la materia coinciden en una cosa: 2014 será el año del Juan Martín. Su progresión año tras año, sólo estancada por sus lesiones de muñeca, le ha ido posicionando poco a poco entre los mejores del mundo pero nunca colocándolo a su mismo nivel. Esta temporada es la hora de que se rompa esa distancia. Un hueco es lo único que pide el argentino a las Navidades. Una oportunidad de meter la cabeza entre los genios para acabar con la dictadura de títulos que arrastran desde hace varias temporadas. Con esfuerzo y una cabeza amueblada -Franco Davin tiene trabajo- a Del Potro le llegará la ocasión de hacer frente a los Nadal, Djokovic o Murray. Ya sorprendió en aquel 2009, cuando con tan solo 21 años le arrebataba al mismísimo Roger Federer lo que hubiera sido su sexto Us Open corrido. La Torre de Tandil necesita tiempo y paciencia. Si sabe esperar y aprovechar sus oportunidades, seguro que en el nuevo año lo veremos luchando por todos los títulos. Aptitudes para ello le sobran.
El nuevo año espera ver a un Federer desatado
[#6] Roger Federer: Quizás el caso más complejo de todos. Es raro ver a Roger Federer pidiendo algo o, simplemente, falto de algo. El ganador de 17 Grand Slams navega por las aguas más arduas de toda su carrera deportiva, un crucero que desemboca, por mucho que nos duela, en la retirada. El suizo, aunque él no lo sabe, ya lo tiene todo. Ha conseguido todo lo que un niño puede soñar, ha llegado a donde nadie ha podido llegar, se ha mantenido en la cima más tiempo que ningún otro y, lo más importante de todo, no solamente ha dejado todos sus triunfos registrados en películas, papel o audios, sino que lo ha grabado a fuego en la retina de todos los espectadores hasta el punto de ser considerado el mejor de la historia en su trabajo. A Roger no le faltan piernas, -aunque la edad aprieta- ambición o tenis, ni mucho menos. Solo necesita retomar la confianza y empezar de cero. El más veterano, que no viejo, del top 10 todavía es capaz de todo, solo requiere de alguien que le refresque la memoria contándole todo de lo que ha sido capaz. Si se lo propone puede alcanzar cualquier meta que ambicione, el problema es que Roger aún no lo sabe. Esperemos que Papá Noel esta noche se lo recuerde.[Que le traiga también fuerzas para la que se le viene encima en el hogar. El suizo será padre de nuevo en 2014. Felicidades Papá Roger]
[#7] Tomas Berdych: He aquí el típico caso de estancamiento permanente. Todas las temporadas, el checo parte como una de las grandes sorpresas del circuito pero siempre se queda inmóvil en la posición de salida. Con la nueva temporada que comenzará en cinco días, Berdych suma ya cinco años consecutivos entre los diez mejores. Y los resultados, para lo que se esperaba de él, han sido algo deficientes. Solo una final de Grand Slam (Wimbledon 2010) que perdería con Rafa Nadal y dos finales de Masters 1000 (ambas perdidas) parece un bagaje pobre para la ilusión que se formó alrededor de aquel niño de veinte primaveras que resultó campeón en París-Bercy en el año 2005.
Tomas le pide a Papá Noel veintiocho sacos de regularidad y cuarenta mochilas de estabilidad. Deshaciéndose de los resultados más nefastos y apretando un poco en las grandes citas, el checo logrará, de una vez por todas, demostrar su valía durante los doce meses del calendario.
[#8] Stanislas Wawrinka: El caso más fácil lo tenemos con Wawrinka quien, públicamente, mostró en su twitter sus deseos para estas Navidades: OTRO AÑO IGUAL. El suizo acabó el 2013 subido en una nube con su clasificación para la Copa de Maestros y casi por delante en ránking de su máximo exponente y compañero, Roger Federer. Por ello que Stan, si pudiera hablar con Papá Noel le diría: "No me traigas nada, pero tampoco me lo quites. Simplemente, déjame como estoy".
¿Quién quedará por delante de quién?
[#9] Richard Gasquet: El francés tampoco puede quejarse de su 2013 y aborda la nueva temporada con energías renovadas y sin nada que perder. Después de once meses en los que dejó un gran sabor de boca, el de Beziers acabó el curso clasificándose entre los ocho mejores para Londres (debido a la baja de Murray) y pudo disfrutar de una semana completa junto a los iluminados de la raqueta, aquellos que de pequeños fueron tocados por una varita mágica para llegar a lo más alto. Precisamente es esto lo que Richard anhela, esa dosis de magia que le permita no solo codearse con la élite, sino también ponerse a su altura y, por qué no, dar alguna que otra sorpresa durante la temporada. Dicen que las Navidades son mágicas, ¿por qué no iba a hacerse realidad?[#10] Jo-Wilfried Tsonga: Situado en el cajón número diez de la ATP, Jo-Wilfried Tsonga lleva mucho tiempo pensando en lo que pedirle a Papá Noel: que se acabe este año cuanto antes. El francés no pudo ofrecer su mejor nivel en 2013 y sus resultados son la mejor prueba de ello. De enero hasta noviembre fue bajando el listón hasta llegar a tocar fondo con una lesión que le apartó del último tramo del año. Es por ello que el galo le pide a las Navidades, como mínimo, volver a ser el que era y regresar al top 5. Con esto, además, sería de nuevo el jugador galo mejor colocado en ránking. 'Alí' Tsonga quiere golpear de nuevo.
@fermurciego