Revista Diario

Querido corazón...

Publicado el 16 octubre 2015 por Marta Bartac @martabartac

Querido corazón...

" Querido corazón, no sé muy bien cómo empezar estas líneas, ni qué decirte en ellas, sobre todo para no hacerte daño. Anoche cuando me oí a mi misma decirte todo lo que llevo en ti, me asusté mucho, tuve miedo. Te he dado tantos sube y bajas, te echo sufrir de mal manera, te e echo llorar.... Eso fue anoche. Querido corazón tu nunca me fallas siempre estas ahí constante, latiendo, y aun que a veces te e echo que dejaras de sentir de golpe no me lo tengas en cuenta, no tenía las ideas claras, ahora ya las tengo después de tanto tiempo.... Sé por lo que no tengo que volver a pasar tu de eso no te preocupes, nadie volverá hacerme daño, no de ese modo. Tengo heridas invisibles en el alma que ya están curadas, y sin ningún tipo de marca. Se que las heridas dolieron y que sangraste mucho por ellas y se todo lo que nos a costado subir a flote.

No era mi intención hacerte sufrir así, tenía que a verme ido antes cuando pude, pero tocó tan dentro, tan profundo... Que la flecha se clavó en un lugar, imposible de sacar, haciéndome daño, y sin para de llorar. Siento mucho por lo que te e echo pasar, por todas las lagrimas, las tristezas, los días en los que no quería comer, por todas y cada una de ellas de las heridas que se han ido formando, y que con el tiempo cicatrizaron por si solas y desaparecieron. Querido corazón gracias por volver a darme esperanzas, por volver a hacerme tan feliz, por curar todo aquello que se había vuelto abrir, por volver a que crea en las cosas bonitas. Prometo que nadie, volverá hacerme sentir mal, nadie me dejará sin fuerzas, sin ganas de comer, sin ganas de vivir, prometo que volveré ha ser la de antes. Se que no tienes ni manos, ni orejas, ni ojos, para responderme, te he golpeado bastante con un muro incapaz de romper, una y otra y otra vez, queriendo que volvieras a sentir por él, que no se apagará aquello que un día me hizo vivir, y a su misma me hizo mucho daño. No sé como he llegado al extremo de que he llorado tanto, que estoy seca no tengo más lagrimas para llorar, estoy vacía, y se corazón que va a costar rellenar otra vez ese hueco. Gracias por darme esperanzas. "


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