En la edición pasada de la segunda maratón de Social Media, una de las cosas que más me llamó la atención fue la expresión del “Cuñity Manager”. Y de verdad que esa palabra inventada viene a definir no el intrusismo, pero si la vulgarización y desprecio de una profesión tan apasionante. Los que venimos del mundo de la informática, estamos muy acostumbrados (un error por nuestra parte) a no saber hacer comprender a nuestro cliente, o al cuñado de turno que esto de ser informático o community no es algo etéreo que se aprende en cuatro tardes. Ya que si fuera tan sencillo llevar redes sociales para conseguir resultados o si fuera tan sencillo programar, todo buen hijo de vecino tendría su aplicación móvil reluciente, o 10.000 seguidores en el haber de su Twiter.
Ya está bien de señoritos de cortijo 2.0, 3.0 y hasta 5.0. El mundo digital es un reflejo del mundo real, y si quieres resultados, hay que hacer como decía aquel refrán “Quién quiera peces, que se moje el ….” .
Culo de mal asiento tiene el empresario que no comprende a la tecnología, y que compara la sencillez de uso de su ipad por su hijo de 3 años, con el despliegue de una base de datos con sus procedimientos. O aquel que compara abrir un blog en Blogger, como un juego de niños.
Porque se puede ser ignorante, pero señor mío contratante de cuñity Manager, deje de hacer el canelo y comparar las redes sociales o el diseño informático, con configurar un MAC o pelar un plátano, lo cierto es que da igual.
Me pregunto yo si en la era del ferrocarril con las máquinas de vapor, había “cuñaos” maquinistas que sabían manejar un tren, simplemente porque coger una pala y echar carbón no tiene ningún misterio.
Pues bien, al igual que las máquinas de vapor, necesitaban de una presión optima, de un mantenimiento constante de la temperatura, de saber aplicar el freno en el momento justo, o de la autonomía que disponían antes de la próxima recarga de combustible. Las redes sociales necesitan del temple justo para que su negocio empiece a caminar. No vale con echar palas de tweets a diestro y siniestro. Así no vamos para ningún lado. En informática no basta con contratar a cualquiera para que empuje el tren de la empresa.
No señores dirigentes de compañías, de talleres de taxi, de tiendas de decoración. Usted necesita un maquinista formado y con experiencia para tirar de su máquina 2.0. Si sigue contratando cuñitis para la comunicación de su empresa, no se enfurezca cuando vea que no sale de la estación.
Para finalizar dejemos un problema para que lo resuelva quién quiera y cuando quiera.
Si un tren sale de su empresa a las 10:00 y su cuñado sale en carreta desde Antequera a las 14:00 ¿Cuánto esperará su cliente para subirse a su empresa? ¿Le respondo yo?…
El fuego de una marca en las redes sociales, se logra con experiencia, constancia y saber hacer. No es cuestión de hablar de cualquier cosa.
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